Washington. De la inflación al derecho al aborto, pasando por la delincuencia, la inmigración y la defensa de la democracia: las preocupaciones de los votantes estadunidenses son diversas, pero unas pesarán más que otras al momento de votar el 8 de noviembre.
La inflación
La subida de los precios es la principal preocupación de los hogares estadunidenses, según todas las encuestas. La oposición republicana acusa al presidente Joe Biden y a su Partido Demócrata de ser responsable de la creciente inflación.
"Hoy en día, desde hacer compras hasta recargar gasolina, todo es más caro", denuncia la candidata conservadora Jen Kiggans, en un aviso de campaña en el que conduce un automóvil.
Los demócratas han evitado hablar de este tema, por temor a que los perjudique. Pero corren el riesgo de parecer desconectados de la realidad.
La actual presidenta de la Cámara de Representantes y líder demócrata Nancy Pelosi, instó este fin de semana a sus correligionarios a dar "un mensaje claro y convincente" sobre la inflación.
El aborto
El derecho al aborto es el as bajo la manga de los candidatos progresistas, luego de que la Corte Suprema revocara en junio la histórica sentencia de 1973 que consagraba el derecho a la interrupción del embarazo a nivel nacional.
La decisión del máximo tribunal del país otorgó a los demócratas un repunte en los sondeos de opinión, alimentando las especulaciones sobre una posible victoria demócrata en estas elecciones de mitad de mandato, tradicionalmente desfavorables al partido del presidente de turno.
Además, los demócratas fueron galvanizados por un referendo organizado a principios de agosto en el muy conservador estado de Kansas, donde los votantes se movilizaron masivamente para rechazar una enmienda constitucional hostil al aborto.
Sin embargo, a dos semanas de las elecciones, las encuestas de opinión muestran que el aborto ya no es la prioridad de los estadunidenses.
La delincuencia
Los republicanos han hecho en cambio de la delincuencia, en aumento en el país según datos de la policía federal, uno de sus principales ángulos de ataque. Acusan a los demócratas de ser incapaces de garantizar la seguridad de los estadunidenses.
En Pensilvania, uno de los estados más disputados de estos midterms, el candidato republicano Mehmet Oz acusa constantemente a su oponente demócrata John Fetterman de ser "blando con el crimen".
Los demócratas han tratado de acallar estas acusaciones aprobando en las últimas semanas una serie de proyectos de ley que supuestamente mejorarán el reclutamiento y la formación de policías en Estados Unidos. Esto molestó al ala izquierda del partido, que milita por reducir el financiamiento de la policía desde la muerte del afroestadunidense George Floyd, asesinado por un policía blanco.
La inmigración
La inmigración, un tema siempre explosivo en Estados Unidos, lo es aún más a pocas semanas de las elecciones. La oposición republicana acusa a los demócratas de haber convertido la frontera con México en un colador.
Estados Unidos registró más de dos millones de detenciones de migrantes en esta frontera entre octubre de 2021 y agosto de 2022. Una cifra récord, que incluye a los reincidentes.
Los republicanos aseguran que esta inmigración irregular alimenta el tráfico de fentanilo en Estados Unidos, un opiáceo sintético hasta 50 veces más potente que la heroína, responsable de la muerte de miles de jóvenes en el país.
Las batallas culturales
Los republicanos también prometen un "futuro basado en la libertad", en particular en las escuelas del país, objeto en los últimos años de encendidos debates sobre el confinamiento, el uso de mascarillas, la vacunación anticovid o la enseñanza del racismo. Esta posición parece encontrar eco en sus bases.
Los conservadores también han continuado su ofensiva contra las deportistas transgénero al abogar por que "solo las mujeres puedan participar en las competiciones deportivas femeninas".
En cambio, los demócratas piden que se amplíen las protecciones para las personas lesbianas, gays, bisexuales y trans (LGBT).
La defensa de la democracia
La defensa de la democracia se ha convertido en una nueva preocupación de los votantes estadunidenses, después de una serie de audiencias de comités parlamentarios que investigan al expresidente Donald Trump, así como el ataque de sus seguidores al Congreso estadunidense del 6 de enero de 2021.
El ex presidente sigue afirmando, sin pruebas, que le "robaron" la elección de 2020, una tesis a la que adhieren millones de sus partidarios y cientos de candidatos republicanos para los comicios del 8 de noviembre.
El cambio climático, el gran ausente
A pesar de los repetidos desastres ambientales en todo el país este año, el tema del calentamiento global casi nunca se abordó durante esta campaña.
Sin embargo, según una encuesta del Washington Post y ABC News, casi el 80 por ciento de los demócratas creen que el cambio climático es "muy importante", en comparación con apenas 27 por ciento de los republicanos.