La colocación de rejas o candados, la instalación de alarmas y cámaras, y la contratación de vigilancia o seguridad privada se han convertido en las principales medidas de protección de las micro, medianas y grandes empresas, informó el presidente de la Coparmex Ciudad de México, Armando Zúñiga.
El año pasado, la inversión en su implementación fue de 22 mil pesos, en promedio, para las microempresas; de 98 mil para las pequeñas; 390 mil para las medianas y de un millón 18 mil para las grandes.
“No todas las unidades productivas, sin embargo, realizaron erogaciones para protegerse y disuadir la comisión de delitos”, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas 2022, afirmó.
De las microempresas, sólo 43 por ciento adquirieron alguna medida de protección, contra 60 de las pequeñas, 70 de las medianas y 72.2 por ciento de las grandes empresas, que en su mayoría es la adquisición de cámaras de vigilancia y seguridad privada, destacó.
El ex coordinador de la Asociación de Seguridad Unidas por Mexico (Asume), que agrupa a 32 organismos de seguridad privada, señaló que en 2021 las empresas a nivel nacional realizaron un gasto de 69.9 mil millones de pesos en medidas preventivas.
Aumentó la cifra negra
Dicha cifra es 70 por ciento menor a lo erogado en 2019, que fue de 226 mil millones de pesos, y representó 1.2 por ciento del producto interno bruto; sin embargo, la cifra negra aumentó a 91.5 por ciento, es decir, que de cada 100 delitos sólo ocho son denunciados.
Mencionó que entre los delitos que no se denuncian, de acuerdo con los encuestados, son secuestros, actos de corrupción, extorsión y fraude, por la desconfianza en las instituciones de investigación y procuración de justicia, donde se tiene que trabajar más.