El Concejo Indígena de Xonacatlán reafirmó la declaración que establece a Juanacatlán, Jalisco, como territorio “libre de industria, libre de megaproyectos, libre de minería y bancos de material”, publicada en el Programa de Ordenamiento Ecológico Local (POEL).
“Este documento en sí mismo no resuelve nuestros problemas, pero es una herramienta importante para poner un freno definitivo a la termoeléctrica y otros aprovechamientos del gasoducto, pero la lucha y la organización deben continuar para hacerlo valer y que no sólo sea letra muerta”, señaló el concejo en un comunicado.
Los pobladores de Juanacatlán indicaron que la publicación del POEL es uno de los “pequeños logros” que han tenido en la organización y resistencia contra los megaproyectos de gobiernos y empresas para defender su territorio. “Un pueblo no puede existir sin el territorio y su memoria, y por experiencia supimos que es imposible continuar sin defendernos”. A continuación, una parte del comunicado:
“A propósito del 12 de octubre, Día de la Resistencia Indígena, queremos celebrar la lucha que como pueblo originario hemos emprendido para defender nuestro territorio de distintas maneras ante los embates de los empresarios y los gobiernos que quieren hacer de Juanacatlán una extensión de los corredores industriales y de la gran ciudad. Desde 2019, los pobladores que le decimos no a esa forma de vida, venimos no sólo oponiéndonos a los megaproyectos como la termoeléctrica y el gasoducto, sino también tratando de organizarnos ante cualquier amenaza que vislumbremos, recorriendo nuestro territorio para conocerlo y reconocerlo, registrando los daños e identificando a sus perpetradores.
“Es importante que vayamos celebrando la vida y los pequeños logros en la defensa de nuestro territorio que, por pequeños que sean, van dándonos ánimos y herramientas para continuar en esa labor. El POEL declara que Juanacatlán está libre de industria, libre de megaproyectos, libre de minería y bancos de material. Este documento no resuelve nuestros problemas, pero es una herramienta importante para poner un freno definitivo a la termoeléctrica y otros aprovechamientos del gasoducto, pero la lucha y la organización deben continuar para hacerlo valer y que no solo sea letra muerta.”