A unos días de su inauguración, el 31 de octubre, el nuevo Hospital IMSS Bienestar Cuajimalpa está prácticamente equipado y listo para atender a la población no derechohabiente en la demarcación, unas 50 mil personas, que se incrementa hasta 250 mil de alcaldías y municipios colindantes.
De hecho, el nosocomio abrió algunos servicios el 28 de septiembre y ayer contabilizaba 226 atenciones médicas, explicó su directora, Nazarea Herrera Maldonado.
A casi siete años y nueve meses de la explosión del Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa por la fuga en una pipa de gas, Herrera explicó en un recorrido que la construcción, realizada por la Secretaría de la Defensa Nacional en un lapso de 15 meses, además de tener un diseño muy ergonómico y sustentable con el medio ambiente, privilegió las medidas de seguridad para evitar una tragedia como la ocurrida el 29 de enero de 2015.
Cuenta con una conexión de gas natural para no tener que abastecerse de pipas y un sistema de detección de concentración de gases; en diferentes puntos se observaron tableros que indican la presión de los mismos. Además tiene salidas de emergencia suficientes y adecuadas para evacuar a pacientes.
Destacó que además de las especialidades con que cuentan los hospitales de segundo nivel, contará con un tomógrafo –en proceso de instalación–, endoscopía, área de sicología y geriatría, así como un centro de atención a la salud del adolescente.
Asimismo, cuenta con cuatro quirófanos para ginecoobstetricia y urgencias y dos más para cirugías programadas, así como 180 camas censables y 10 consultorios para consulta externa. Tendrá una plantilla laboral de unas 800 personas que podría llegar a más de mil.