Tegucigalpa. Una caravana con unos 250 migrantes hondureños partió ayer desde el noroeste de ese país con la esperanza de llegar a Estados Unidos tras huir de la violencia y pobreza en casa, dijeron funcionarios, en momentos en que miles de venezolanos atraviesan la región buscando el sueño americano.
Los migrantes, en su mayoría jóvenes hondureños, según imágenes de la televisión local, salieron de San Pedro Sula, una de las ciudades más pobladas de Centroamérica. Posteriormente, un número indeterminado de venezolanos se les unió.
“Salieron aproximadamente unos 250 (hondureños). Se les está sumando un grupo de venezolanos que está varado aquí en el país”, dijo a Reuters Joseana Martínez, portavoz del Instituto Nacional de Migración (INM).
El grupo caminaba ayer hacia Agua Caliente, en la frontera con Guatemala, ubicada a unos 174 kilómetros al suroeste de San Pedro Sula. Usualmente, los migrantes siguen su camino atravesando Guatemala y México hasta llegar a la frontera con Estados Unidos.
Durante el largo trayecto, sufren las peripecias del clima y la inseguridad. Algunos son secuestrados, otros perecen y algunos son deportados por autoridades mexicanas o estadunidenses. Se calcula que 74 por ciento de los casi 10 millones de hondureños vive en la pobreza. Las condiciones de vida empeoraron con la pandemia de covid y tras dos fuertes huracanes que golpearon el país a fines de 2020.
Cada vez más, miles de venezolanos huyen de la persistente crisis en su país y atraviesan Centroamérica en busca del sueño americano.