Ciudad de México. El sector manufacturero tuvo un avance de 8.1 por ciento durante septiembre, comparado con el mismo mes del año anterior, y también se expandió 1.2 puntos porcentuales por encima de lo observado el mes inmediato anterior, cuando incrementó 6.9 por ciento, reveló BBVA.
Al presentar su indicador multidimensional de la manufactura, la institución refirió que el crecimiento moderado del sector señala la resiliencia de la manufacturera doméstica ante un desempeño mejor al esperado en el sector industrial de Estados Unidos, aunque los indicadores de nuevos pedidos manufactureros en México y ese país apuntan hacia una desaceleración en los siguientes meses.
Lo anterior, debido al entorno de debilitamiento de la demanda ante los altos precios y una política monetaria más restrictiva.
“El promedio de la variación interanual del indicador BBVA en el tercer trimestre del año asciende a 6.7 por ciento, por debajo de 7.2 por ciento registrado en el trimestre anterior, lo que señala una ralentización con respecto al trimestre previo”, apuntó BBVA.
Destacó que el indicador IMEF manufacturero reportó un nivel de 50.13, tras ubicarse en territorio de contracción en agosto, mientras que en términos de capacidad utilizada, el subsector de fabricación de equipo de transporte superó su nivel previo a la pandemia por primera vez desde marzo (actualmente 2.3 por ciento por arriba de su nivel de enero de 2020).
Este hecho, expuso el banco, refleja el "desvanecimiento de los cuellos de botella en este segmento, tras la escasez de semiconductores registrada en 2021”.
"No obstante, otros subsectores continúan enfrentando dificultades en la producción; la capacidad utilizada en la industria de alimentos procesados que es afectada por altos costos de insumos derivados del conflicto en Ucrania aún se encuentra 2.5 por ciento por debajo de su nivel pre-pandemia, con nulo crecimiento en agosto, mientras que la industria química registra un nivel 2.9 por ciento menor”, externó el banco.
Así, BBVA estimó que la resiliencia del sector manufacturero en México y Estados Unidos no se prolongará el resto del año, ante las condiciones restrictivas para la demanda.
“Mantenemos nuestra expectativa de bajo crecimiento para la segunda mitad del año, con mayor deterioro en 2023, en un entorno de alta inflación y mayor costo del financiamiento”, explicó el área de análisis.
Así, BBVA anticipa que la economía estadunidense mostrará una desaceleración más profunda a partir del segundo trimestre del próximo año, lo que tendrá una repercusión en el sector exportador mexicano.
“Mantenemos nuestra estimación de crecimiento del PIB en 0.6 por ciento para 2023, y en 2 por ciento para este año en México, impulsado por el rebote del primer semestre de 2022, pero con un lento crecimiento hacia adelante”, añadió.