Nueva York. Moscú reevaluará su cooperación con la secretaría de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) si se inicia una investigación sobre la presunta utilización de drones iraníes en Ucrania, dijo el miércoles a la prensa el representante permanente adjunto de Rusia en el organismo, Dmitri Polianski.
"Esperemos que la secretaría y el secretario general (de la ONU, Antonio Guterres) no comiencen a violar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, no vayan más allá de sus mandatos técnicos y se abstengan de participar en investigaciones ilícitas", dijo el funcionario.
Polianski añadió que, de lo contrario, Rusia tendrá que "reconsiderar" su colaboración con ellos, lo que "no beneficiará a nadie".
"No queremos hacerlo, pero no tendremos otra opción", dijo el diplomático.
Polianski agregó que la secretaría de la ONU no tiene la obligación de llevar adelante una investigación sobre este asunto.
El periódico estadounidense The Washington Post informó el domingo que Irán supuestamente planea suministrar a Rusia cohetes balísticos de fabricación propia.
Según afirmaciones de la inteligencia estadounidense citadas por la prensa, se trata de un lote de cohetes Fatah-110 y Zolgar, capaces de destruir blancos a distancias de 300 y 700 kilómetros, así como del suministro adicional de drones a Rusia.
El portavoz de la Cancillería de Irán, Naser Kanani, refutó las noticias sobre los suministros de armas por Irán a Rusia para su uso en las operaciones en Ucrania.
La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, también indicó que el tema fue propagado artificialmente en los medios estadunidenses