Londres. Buscando calmar urgentemente unos mercados financieros sumidos en el caos, el nuevo ministro de Finanzas británico, Jeremy Hunt, informó el lunes la supresión de “casi todas las medidas fiscales” presentadas tres semanas antes por el gobierno de Liz Truss.
Más debilitada que nunca tras la supresión de la mayoría de sus polémicas medidas fiscales, la primera ministra británica enfrenta peticiones de dimisión.
“La primera ministra y yo acordamos ayer dar marcha atrás a casi todas las medidas fiscales anunciadas en el plan de crecimiento de hace tres semanas”, expuso Hunt ante el Parlamento, en una comparecencia urgente para calmar el nerviosismo antes de la presentación, prevista el 31 de octubre, de su presupuesto detallado.
Truss y el anterior ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, habían anunciado el 23 de septiembre un plan de rebajas fiscales no financiadas por valor de 45 mil millones de libras (50 mil millones de dólares) que asustó a los mercados financieros, hundió la libra a mínimos récord y obligó al Banco de Inglaterra a tomar medidas de emergencia.
Además de la decisión comunicada el pasado viernes por la propia Truss de dar marcha atrás en el plan para cancelar la subida del impuesto de sociedades a 25 por ciento desde 19 por ciento, este lunes se decidió suspender “de manera indefinida” la reducción de un punto porcentual en el impuesto sobre los ingresos, que iba a entrar en vigor a partir del año que viene.
Ahora, según el nuevo plan, la mayor parte de los 45 mil millones de libras de recortes fiscales sin financiamiento de Truss desaparecerán, mientras que un plan de apoyo energético de dos años para los hogares y las empresas –que se espera que cueste más de 100 mil millones de libras– sólo estará vigente hasta abril, a partir de entonces, el gobierno lo revisará.
Hunt explicó que los cambios previstos permitirán recaudar 36 mil millones de dólares cada año. En contraste, los analistas preveían un agujero financiero de 60 mil millones de libras con las medidas precedentes.
Más tarde, Truss salió a disculparse por los “errores” de su programa, pero dijo que no dimitiría.
“Quiero aceptar la responsabilidad y pedir perdón por los errores”, declaró Truss a la BBC.
“Quería actuar pero para ayudar a la gente con sus facturas de energía, para hacer frente a la cuestión de los altos impuestos. Pero fuimos demasiado lejos y demasiado rápido”, añadió.
El cambio de rumbo en las medidas fiscales de Reino Unido llevó el lunes a los mercados financieros a terreno positivo.
En Wall Street, el Dow Jones cerró con alza de 1.87 por ciento, el tecnológico Nasdaq subió 3.43 por ciento y el S&P 500 avanzó 2.65 por ciento. Mientras la Bolsa Mexicana de Valores ganó 1.71 por ciento a 46 mil 220.72 puntos.
La cotización de la libra esterlina registró su mejor jornada desde marzo de 2020, al comienzo de la pandemia.
El cruce de la libra esterlina frente al billete verde alcanzó los 1.1439 dólares, después de que el pasado 28 de septiembre llegara a hundirse a 1.0539 dólares.