La Compañía de Jesús condenó la inclusión del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez dentro de una presunta lista de “grupos de presión” elaborada por el Ejército, según los archivos difundidos por el grupo de hackers “Guacamaya”.

En un comunicado, la orden religiosa sostuvo que esto es particularmente delicado luego del asesinado de dos de sus miembros en Cerocahui, Chihuahua, ocurrido el 20 de junio pasado.

“Nos indigna el contenido de los documentos militares relacionados con el caso de Cerocahui que se han hecho públicos. De acuerdo con la información difundida en medios, estos indicarían que el Estado mexicano identificó, con antelación, las actividades delictivas en la sierra Tarahumara de quien a la postre perpetraría el homicidio de nuestros hermanos Joaquín Mora y Javier Campos, mismo que a más de cien días sigue impune”, señaló la Compañía de Jesús en un comunicado.

Agregó que le preocupa que, según las filtraciones, el centro sea objeto de un monitoreo intensivo y que sus actividades sean seguidas por la inteligencia militar en lugar de concentrarse en dar con los responsables de estos asesinatos.

“Los jesuitas en México seguiremos exigiendo paz y justicia. Damos testimonio de la labor legitima de nuestra obra social, Centro Prodh, quien ha contribuido - como invita al Papa Francisco – “con coraje y determinación” en la defensa, promoción y difusión de los derechos humanos. Continuaremos haciendo oír nuestra voz, siempre tan respetuosa como firme, para impulsar la reconciliación del país”, agregó la orden.