Ciudad de México. La 33 edición de la Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH) llegó a su fin el domingo 16, entre notas musicales de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México y la banda Acapulco a go gó, porque no todo fueron impresos. También hubo actividades de música, teatro, danza contemporáneo y talleres.
Era la primera FILAH presencial después de dos años de presentaciones virtuales, debido a la crisis sanitaria, y el público respondió. A lo largo de los 11 días que duró la feria, acudieron más de 55 mil personas.
Efectuada en el gran patio del Museo Nacional de Antropología (MNA), los que entraron sin boleto –la entrada fue gratuita-- es porque iban a la FILAH, señaló Beatriz Quintanar Hinojosa, coordinadora nacional de Difusión del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Eso no quitaba que los visitantes a las salas del museo se dieran una vuelta también a la feria y tal vez compraran algún libro. El sólo hecho que visitaban el museo significaba que les interesaba la antropología.
Realizada con el lema de “Globalización y resistencia”, la 33 edición de la FILAH desarrolló más de 260 actividades, entre presentaciones editoriales, exposiciones (tres en el vestíbulo del Auditorio Fray Bernardino de Sahagún), seis coloquios, cinco homenajes (cuatro póstumos y uno en vida) y 12 conferencias magistrales. Los invitados de honor fueron el Estado de México y Chile. También hubo una venta nocturna.
“Tuvimos una concurrencia relevante por parte de los académicos. Más de mil especialistas acudieron, dándole vida a la FILAH, lo que significó que los temas de la antropología estuvieron cerca del público. Alrededor de 4 mil 500 personas asistieron a las actividades académicas. Hubo más de 150 presentaciones editoriales, 120 presenciales y 30 en línea, 70 expositores y un centenar de stands alrededor de la emblemática fuente del ‘paraguas’ del MNA. Fue una fiesta de los libros”, indicó la entrevistada.
Hubo novedades y muchos aprendizajes. “Organizamos el primer Festival de Cine Antropológico, con la proyección de 14 películas, y directores y protagonistas participantes en las funciones. Queremos que un segundo festival sea más potente, a lo mejor en un horario un poquito más temprano (las funciones fueron a las 18:00 horas) para tener mayor afluencia”. Asistieron más de 500 personas.
También se realizó el segundo Concurso de Video Antropológica “Miradas sin tiempo”, cuya premiación fue el pasado día 15. Para la próxima edición tal vez se añadan nuevas categorías”, apuntó Quintanar.
A pregunta expresa, dijo que la FILAH mantendrá la modalidad virtual porque “nos permite llegar a otros países y personas que no nos pueden acompañar físicamente, sin embargo, nos siguen”. La feria contó con más de 800 mil visitas por medio de sus redes sociales, lo que “nos da un alcance mucho mayor y lo vamos a conservar. Hicimos transmisiones en vivo, una virtud de esta edición. Queremos extender los temas y el interés por la antropología a otras latitudes. La virtualidad permite que no haya fronteras ni límites”.