La policía capitalina desarticuló una célula delictiva que se autonombraba Los Diamantes, dedicada al robo con violencia a transportistas de carga que operaba en la Ciudad de México y en los estados vecinos de Morelos, Querétaro, Puebla e Hidalgo.
El secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, explicó que el modus operandi consistía en el ingreso de sus integrantes como empleados de las empresas durante dos o tres meses antes de perpetrar los robos, situación que les facilitaba obtener información de la operación de las mismas, como la llegada y salida de los cargamentos con alto valor monetario.
En los meses recientes se le vinculó a tres robos: uno de 25 toneladas de carne en Tlalmanalco, otro en Tepotzotlán de mercancía de origen chino valuada en varios millones de pesos, y uno más de tres tráileres con cargamentos de hilos cometido en Cuautitlán.
Detalló que para el traslado de la mercancía robada, los delincuentes utilizaban tractocamiones de la empresa de logística y maniobra Vishion –propiedad de Mario Francisco N, líder de la agrupación delictiva, quien se encuentra detenido–, utilizada como fachada para sus actividades ilícitas.
Con la ayuda de aparatos electrónicos conocidos como inhibidores, evitaban el funcionamiento de los GPS y trasladaban las cajas de los tráileres a bodegas ubicadas en las alcaldías Iztapalapa y Azcapotzalco, y a otra ubicada en Jiutepec, Morelos.
Después se ofrecía lo robado en grandes y pequeñas escalas a empresarios de su confianza, quienes por un pago muy por debajo de su valor adquirían la totalidad de esta mercancía, refirió el jefe policiaco.
A partir de labores de inteligencia se realizaron 10 cateos en la Ciudad de México y los estados de México y Morelos, con lo que se logró la detención de 10 integrantes de la agrupación delictiva y el aseguramiento de siete inmuebles, droga, armas cortas, largas y cartuchos, así como mercancía como bloques de hilo, bobinas de fibra de vidrio, montacargas, camiones e inhibidores de señales.