Washington. Miles de personas se manifestaron ayer en ciudades de Estados Unidos para protestar por la anulación del derecho federal al aborto por la Corte Suprema y para instar a los ciudadanos a votar por los demócratas en las elecciones de mitad de mandato, el 8 del próximo mes.
Al grito de: “No volveremos atrás”, en Washington, una multitud, en su mayoría mujeres, marcharon con carteles que pedían un “tsunami feminista” para “salvar los derechos”. Emily Bobal, estudiante de 18 años, dijo a Afp: “No quiero volver a una época diferente. Es un poco ridículo que todavía tengamos que hacer esto en 2022”, al afirmar que le preocupa que el alto tribunal, dominado por los conservadores, pueda poner en la mira al matrimonio entre personas del mismo sexo.
Varios llevaron brazaletes o pañuelos verdes, color que simboliza el derecho al aborto. Otros vestían de azul –el del Partido Demócrata–, con enormes banderas y pancartas en las que pedían una “ola azul” simbólica de votantes.
Fueron recibidos con abucheos un grupo pequeño que se manifestaba en contra –algunos instando a la multitud a “encontrar a Jesucristo”– y otros que gritaban “el aborto es un asesinato”. En Nueva York, decenas corearon consignas a favor del derecho de interrumpir el embarazo en Foley Square, donde hubo altercados con manifestantes provida.
En Denver, activistas se reunieron en el parque del Centro Cívico para protestar sobre lo que el organizador describió como esfuerzos para limitar los derechos de las mujeres, informó The Denver Gazette.
En Houston, decenas portaron carteles, entre ellos uno que decía “El aborto es un derecho”, afuera del juzgado del condado de Harris.
Las encuestas muestran que los demócratas solo tienen una leve posibilidad de mantener el control de la Cámara de Representantes, pero sus oportunidades son mejores en el Senado, dividido en partes iguales, donde la vicepresidenta demócrata Kamala Harris tiene el voto de desempate.
Mientras los republicanos han hecho campaña en torno al alza de precios, la preocupación por la inmigración y la delincuencia, los demócratas, liderados por el presidente Biden, quieren trasladar el debate al derecho al aborto y a la defensa de la democracia.
La Corte Suprema puso fin en junio a décadas de protección federal del derecho al aborto, dejando en manos de cada estado establecer sus propias normas.
Desde entonces, varios estados liderados por republicanos han prohibido o restringido severamente el acceso al procedimiento, provocando una serie de desafíos legales.
En Ohio, un juez suspendió ayer indefinidamente una ley estatal que prohibía la mayoría de los abortos después de seis semanas de embarazo.
Unas horas más tarde, un tribunal de apelaciones de Arizona bloqueó temporalmente la ley territorial que lo inhibía, por lo que podrá interrumpirse hasta las 15 semanas de gestación.