Expertos del sector financiero indicaron que de aprobarse en el país que los pagarés electrónicos sirvan como medio de financiamiento para las personas, el crédito en canales tradicionales y digitales tendría una penetración más acelerada en la población.
Jorge Goñi Camarillo, director de cobranza legal de Banco Azteca, expuso que en cualquier parte del mundo el crédito funciona como el motor de la economía, por lo que es necesario analizar cualquier forma con la cual se pueda otorgar mayor financiamiento a la población.
Mauricio Castañeda, director general de Konekta y Finte, planteó que si los pagarés digitales son puestos en marcha en el país de forma legal como mecanismo de crédito, las zonas más marginadas del país pudieran tener acceso a un instrumento financiero para solventar parte de sus necesidades.
Explicó que en México más de 90 por ciento de las personas que ya son sujetas a un préstamo cuentan con un smartphone, lo que abre la puerta a que no sea necesario contar con infraestructura física para que bancos y fintech lleguen a más personas.
Los expertos también señalaron que con los pagarés digitales tienen la capacidad de reducir los potenciales fraudes o robos de identidad que se hagan a los consumidores, ya que solamente es necesario una firma electrónica.
En otro tema, el impago de los créditos en el sector popular no se ha elevado pese a las presiones inflacionarias que han provocado una falta de liquidez entre las familias de menores recursos, indicó Goñi Camarillo.
El directivo de Banco Azteca señaló que en meses recientes el comportamiento de los clientes que acuden a esta institución financiera para solicitar un crédito ha sido prudente, de hecho, no se tiene registro de una mayor cantidad de restructuras de deuda.
“Las acciones de cobranza no han aumentado, nuestros indicadores están normales desde hace varios años y la clientela que acude al banco a solicitar un crédito tiene un comportamiento bueno y honra sus promesas de pago.”
Tras participar en un foro, apuntó que de cara al último trimestre del año, en el que la demanda de crédito en el sector popular suele incrementarse, no se prevé que los índices de impagos vayan al alza pese a que las presiones inflacionarias persistan.
“Estamos ajustando capacidades de pago a los clientes, otorgamos crédito a quien lo puede cubrir, pero no vemos un cambio radical en nuestra estrategia de colocación de crédito”, mencionó.
La última información disponible de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) indica que, hasta julio, Banco Azteca cuenta con una cartera de crédito total de 144 mil 736 millones de pesos, y de ese monto el 3.79 por ciento o el equivalente a 5 mil 584 millones de pesos son cartera vencida.