Si los militares regresan a sus cuarteles “la delincuencia haría fiesta”, aseveró ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador, al defender una vez más la iniciativa de reforma para ampliar la colaboración de las fuerzas armadas en acciones seguridad pública hasta 2028.
Sin embargo, puntualizó durante la mañanera del martes: “Vamos a preguntarle a la gente qué opina y si la gente dice ‘no queremos que el Ejército siga en las calles, que se vaya a los cuarteles’, a los cuarteles el Ejército. Lo que diga el pueblo, pero no limitarnos a lo que diga el conservadurismo, un grupo del partido conservador”.
En respuesta a una interrogante sobre la declaración del domingo del Comité 68, que exigió que los militares no permanezcan en las calles, el mandatario apuntó: “¡A ver: 300 mil (soldados) a sus cuarteles, ya! Pues hacen fiesta los de la delincuencia y no sólo los de la delincuencia organizada, sino los de la delincuencia de cuello blanco”.
De nuevo señaló la necesidad de que el Ejército y la Marina mantengan el apoyo para enfrentar la inseguridad y violencia en el país y remarcó que “los errores que han cometido se han originado por órdenes de autoridades civiles”, como la masacre del 2 de octubre de 1968 o la guerra contra el narcotráfico emprendida por Felipe Calderón.
Inclusive recordó que durante el desafuero en su contra, en 2005, el entonces secretario de la Defensa, Clemente Vega, “le mandó a decir a (Vicente) Fox y al secretario de Gobernación, Santiago Creel, que el Ejército no iba a salir a las calles, sólo si se lo solicitaban por escrito. Y después, cuando ya las cosas estaban más calientes, les mandó a decir que ni por escrito”.
Así, convocó a que el análisis no sea maniqueo. “Ahora, el presidente, que es el comandante supremo de las fuerzas armadas, ha dicho y sostiene que no se va a usar al Ejército para reprimir al pueblo. Y no ha habido tortura como antes, ni masacres ni desaparecidos. No es que el Ejército sea sinónimo de represión, no, eso depende de quién gobierna (…) es pueblo uniformado y es un ejército profesional, leal, subordinado a las instituciones constitucionales y a las leyes que rigen. Entonces, no tenemos por qué no apoyarnos en el Ejército y en la Marina para garantizar la paz, la tranquilidad”, concluyó el mandatario.