El poder adquisitivo de los trabajadores sindicalizados sufrió una merma importante en lo que va del año debido a la alta inflación, la cual “está poniendo un límite” a la hora de negociar los incrementos en las revisiones salariales contractuales, señaló Gabriel Badillo, académico del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

En términos nominales, los salarios contractuales subieron 5 por ciento en agosto, pero la tasa de inflación general en México fue de 8.7 por ciento a dicho mes, de acuerdo con cifras oficiales.

Así, al descontar el índice de la inflación, los salarios contractuales registraron una contracción de 3.7 por ciento en términos reales.

Aunque en términos nominales se tuvo un aumento de 6.5 por ciento de enero a agosto, los salarios de trabajadores bajo contrato colectivo sufrieron una variación negativa de 1.18 por ciento descontada la inflación, indica la Secretaría del Trabajo.

“En el ámbito federal, los incrementos contractuales no llegan a uno por ciento. Es decir, en términos nominales parecen espectaculares los aumentos de 8 por ciento, pero, descontada la inflación, nos damos cuenta que el incremento es casi nulo o en algunos casos negativo”, indicó el especialista.

En los primeros ocho meses del año ha predominado la contracción en los salarios contractuales. Sólo en marzo, mayo y julio tuvieron una recuperación de 0.97 por ciento, 0.55 y 1.19.

En ese periodo, ha habido mil 908 revisiones salariales, las cuales han involucrado 967 mil 129 trabajadores.

Por central obrera, los trabajadores afiliados a sindicatos ligados a la Confederación de Trabajadores de México tuvieron una caída de 1.55 por ciento en agosto, mientras en la CROC, tuvieron una recuperación de 1.03 por ciento.

Los afiliados a sindicatos independientes del Congreso del Trabajo (del IMSS, ASSA, ASPA, universitarios, entre otros) tuvieron una contracción de 4.16 por ciento en el mismo mes.

Badillo señaló que es complicado que el sector empresarial acepte un aumento salarial arriba del índice de inflación, pero consideró que hay “mayor disposición” que en años anteriores para negociar. Añadió que los aumentos en empleados con contrato colectivo “suelen ser menores” porque los ingresos que perciben son mayores a los que no están sindicalizados.