Buenos Aires. El juez federal Daniel Rafecas procesó ayer a Claudio Herz, a quien consideró responsable penalmente de los delitos de amenazas e intimidación pública, cuando con un pequeño grupo se manifestó ante el Instituto Patria, sede del kirchnerismo en esta capital, el pasado 21 de julio y amenazó con un megáfono a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, al advertir que la iban a ahorcar.
Herz dijo que buscaría a Fernández de Kirchner con ametralladoras y que iba a matar a su hijo, Máximo, y a otros militantes, agravado el caso por la serie de comunicaciones de este personaje con figuras importantes de la alianza opositora Juntos por el Cambio.
La semana pasada Herz, manifestante agresivo desde los tiempos de la pandemia, se negó a declarar ante el juez federal Rafecas, quien dispuso su procesamiento además por incitación a la violencia y un embargo sobre sus bienes por unos 2 mil 692 dólares.
“Les queda poco tiempo: los vamos a buscar con ametralladoras para liquidarlos en el momento y ahorcarlos”, advirtió Herz por un megáfono. “Ahora te toca la horca, el único camino para deshacernos de ti, de tus cómplices, de tu hijo y de toda la basura que nos gobierna. Eso es lo que vamos a hacer”.
Fue la fiscal Mónica Cuñarro quien, después de ver las imágenes de ese día denunció ante la justicia ordinaria el hecho, ocasión en la que un policía de la municipalidad de Buenos Aires saludó amistosamente a Herz, mientras atacaban el edificio causando daños en ventanas y puertas.
Por otra parte, a más de un mes del atentado contra la vicepresidenta, la investigación sobre los responsables intectuales avanza lentamente, a pesar de la cantidad de datos que surgen de los celulares de los procesados y que llevan hacia los responsables intelectuales, creando cada vez más tensión en el oficialista Frente de Todos.
Además de imponer la prisión preventiva de Fernando Sabag Montiel, el hombre que apuntó con una pistola a 15 centímetros de la cabeza de la vicepresidenta el pasado 1º de septiembre sin que saliera la bala, y Brenda Uliarte, su novia y cómplice, también fueron procesados Gabriel Carrizo y Agustina Díaz. Se sabe ahora que Sabag Montiel actuaba “por plata”.