Guadalajara, Jal., Dos meses y medio después de haber sido quemada viva en un parque de la colonia Arcos, en el municipio de Zapopan, la muerte de Luz Raquel Padilla, madre de un menor que padece autismo, sigue sin ser resuelta por la Fiscalía del Estado, el caso sin ser atraído por la Fiscalía General de la República (FGR) y sin que exista una recomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ).

El fiscal Luis Joaquín Méndez fue citado el mes pasado al Congreso local para que, a puerta cerrada, informara sobre los avances de la investigación; sin embargo, insistió ante los diputados en que Luz Raquel fue quien escribió los mensajes amenazantes contra ella misma en las escaleras del edificio multifamiliar en que vivía.

El funcionario reiteró las supuestas pruebas que sugieren que ella fue la que se inmoló con alcohol y un encendedor.

La FGR no ha atraído el caso a pesar de que la fiscalía estatal pidió su intervención y de que la secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana federal, Rosa Icela Rodríguez, en una visita que hizo a Jalisco en agosto, informó que era “cuestión de días” para que esa institución se hiciera cargo debido a que “no hay un interés del estado (de Jalisco) para continuar las investigaciones”.

Ni la CEDHJ ha dado muestras de dar seguimiento al caso tras la llegada de su nueva titular, Luz del Carmen Godínez, el 2 de agosto.

Érika Córdova, quien ese mismo día fue destituida por Godínez de la dirección de quejas, declaró que era inminente una recomendación a los gobiernos estatal y de Zapopan.