Moscú. La ministra de Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, consideró que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) no debe involucrarse directamente en un conflicto armado en contra de Rusia, a pesar de la solicitud urgente presentada por Ucrania para integrarse a la alianza.
Reconoció que entiende la postura del presidente ucranio, Volodymir Zelensky, de ingresar a la OTAN, pero también aclaró que la prioridad es garantizar la paz mundial, un objetivo que no podrá cumplirse si el conflicto bélico se expande a más naciones por la participación de la alianza noratlántica.
“Tenemos la responsabilidad de garantizar que la guerra no se extienda a otros países y que la OTAN no se convierta en un socio bélico”, declaró Baerbock en una entrevista para Brennpunkt, de la cadena ARD.
Además, el Parlamento alemán votó en contra de incrementar el envío de armamento para que el ejército ucranio refuerce sus combates contra las tropas rusas en la conflagración que ya cumplió siete meses.
Ayer, 476 diputados rechazaron la propuesta de un aumento “importante” en ayuda militar a Kiev, del bloque conformado por la Unión Demócrata Cristiana y laUnión Social Cristiana de Baviera. Sólo 179 sufragaron a favor.
Dilema europeo
En un tema paralelo, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, reiteró que su gobierno se niega a ratificar la solicitud de adhesión de Suecia y Finlandia a la OTAN “hasta que las promesas” de ambos países “se cumplan”.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, indicó al canal público español RTVE que la anexión rusa de cuatro territorios ucranios ocupados de Donietsk, Lugansk Jersón y Zaporiyia hace “prácticamente” imposible el fin de la guerra en Ucrania.
Poco después, Borrell intervino en un foro de debate en La Toja (Galicia, noroeste de España), en el que defendió la necesidad de un “rearme coordinado” de la Unión Europea para preparar al bloque comunitario para una posible guerra.
España y Corea del Sur condenaron por separado las adhesiones de los cuatro territorios.