Si los diputados lo hicieron esperar dos horas para su comparecencia ante el pleno, donde explicó el paquete económico 2023, el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, se tomó una hora para comer en la zona conocida como tras banderas, aun cuando la mesa directiva sólo había previsto 10 minutos para un receso.
El postre, unas tartaletas de fresa, se lo comió mientras iniciaba la ronda de preguntas.
Habitualmente, en las comparecencias ante el pleno a los funcionarios federales se les ofrecen bocadillos, en un breve descanso. Pero inusualmente, Ramírez de la O se tomó su tiempo, de las 2 a las 3 de la tarde, y aunque esperaban a que reanudara la comparecencia, ningún diputado se lo reprochó en la tribuna.
En un video en el pleno, mientras el receso transcurría, Cynthia López Castro (PRI), expresó: “Nunca, a ningún secretario le dieron tiempo para comer. Hasta en covid, Esteban Moctezuma estuvo todo el tiempo en la comparecencia”.
Durante aquellas dos horas, mientras la Junta de Coordinación Política cuestionaba y ceñía al presidente de la Cámara, Santiago Creel PAN), para impedirle declaraciones sin previa consulta, el funcionario permaneció en el antiguo salón de protocolo.
Ya luego en su presentación inicial, el secretario enfocó el objeto del paquete económico de 2023 hacia la transición política de 2024, pero ninguna bancada acusó recibo. Las posturas se enfocaron hacia lo erróneo de las principales variables económicas y, sobre todo, al impacto de la inflación en el consumo de los mexicanos.
En defensa del paquete económico, Morena manifestó que el país “goza de finanzas sanas y una economía estable, quiera o no la oposición moralmente derrotada”.
Estabilidad económica
La vicecoordinadora de la bancada, Aleida Alavez Ruiz, indicó que en su partido se mantiene la convicción del manejo responsable de la economía. “Afrontaremos esto con mejor visión de lo que implica tener en nuestras manos la decisión de los recursos públicos. Estamos aquí para defender la estabilidad económica”, expresó.
Reginaldo Sandoval atajó: “para mantener la ruta, ¡no le vamos a mover ni una coma!” a la Ley de Ingresos ni al Presupuesto de Egresos.
La comparecencia, como parte de la glosa del cuarto Informe presidencial, tuvo momentos ríspidos.
Las priístas Jazmín Jaimes y Melissa Vargas se plantaron frente al funcionario con dos cartulinas en las que escribieron: “Señor secretario, la inflación está de la chingada”. También María Clemente García (Morena) desplegó una cartulina para reclamar fondos a la viruela símica y a vacunas. “No exponga la salud del pueblo de México”, demandó, postura que le valió gritos de su bancada.
En pleno frente frío número uno, la Cámara mantuvo al máximo el aire acondicionado. El funcionario comenzó a toser y el malestar se acentuó mientras respondía a una pregunta de Salvador Caro (MC), sobre el impacto del incremento de precios.
“La inflación fue generada fuera de México, no es un consuelo, pero sí una explicación. El Estado ha respondido puntualmente al reto de un aumento en los precios de alimentos, ¡cof! y después, ¡cof..! Su aire acondicionado está medio agresivo. ¡Cof, cof!”, lanzó.
Caro Cabrera reviró: “El aire acondicionado es inclemente, como la política económica del gobierno federal. De su respuesta, se deduce que en términos de inflación vamos a quedar a la buena de Dios”.