Atenas. El ministro griego de Migraciones, Notis Mitarakis, denunció este lunes "la falta de voluntad" de sus socios de la Unión Europea (UE) en la reubicación de migrantes que entran en el bloque, especialmente por la frontera greco-turca.

Los países del sur de Europa que reciben en primer lugar a los migrantes (España, Grecia, Italia, Malta y Chipre) estiman que "las llegadas van a elevarse a unas 160 mil personas" este año, informó el ministro en una rueda de prensa.

"Es decepcionante constatar que los demás países miembros apenas han propuesto 1mil 17 plazas de reubicación", fustigó.

Mitarakis recordó una decisión en junio de los ministros a cargo de las migraciones de crear "un mecanismo voluntario de relocalización a partir de países de primera recepción hacia otros países europeos", para aliviar la presión sobre los Estados meridionales.

"Hay una falta de voluntad de la mayoría de los países miembros para participar en este mecanismo", insistió.

El ministro también indicó que este año hubo una mayor presión en las fronteras griegas: "En 2021, el número de personas que llegaron a Grecia fue de 8 mil, frente a las 10 mil en lo que llevamos de 2022", precisó.

Atenas, en primera línea de la crisis de refugiados en 2015, deplora desde hace años la falta de solidaridad de sus socios de la UE.

Grecia, con su larga frontera terrestre y marítima con Turquía, es una de las principales puertas de entrada al bloque de las personas que huyen de la guerra, conflictos internos o de la pobreza.