Nueva York. Israel impide deliberadamente el avance hacia una solución de dos estados en Medio Oriente y ya no puede ser considerado un socio confiable en el proceso de paz, dijo ayer ante la 77 Asamblea General de Naciones Unidas el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, y afirmó que el llamado del primer ministro israelí, Yair Lapid, a favor de una solución de dos estados es un “avance positivo”, pero la prueba sería “la vuelta a las negociaciones”.
Israel “está, con sus políticas premeditadas y deliberadas, destruyendo la solución de dos estados. Esto prueba inequívocamente que Israel no cree en la paz. Por lo tanto, ya no tenemos un socio israelí con quien podamos hablar”, afirmó en su discurso.
Destacó asimismo que Tel Aviv lleva a cabo una campaña de colonización en los territorios palestinos y otorga a su ejército “total libertad” para matar o recurrir a la fuerza de manera excesiva.
“A la periodista Shirin abu Aklé, (reportera de Al Jazeera) la mató un francotirador. Es un acto deliberado que Israel ha reconocido. Ella tenía también nacionalidad estadunidense, por lo que instó a Washinghton a procesar a los responsables de esa muerte, pero no lo van a hacer. ¿Por qué? Porque son israelíes”, deploró.
“La verdad es que es un régimen de apartheid”, señaló, y exigió que Israel rinda cuentas por “sus masacres” y acusó a la comunidad internacional de “proteger” a Israel.
El líder palestino, de 87 años, reiteró el llamado a que Tel Aviv sea llevado ante la Corte Penal Internacional.
El jueves, en el mismo podio, el primer ministro israelí, Yair Lapid, afirmó que “una gran mayoría de israelíes apoya esta visión de la solución de dos estados”. “Yo soy uno de ellos, con la condición de que un futuro estado palestino sea pacífico”.
En su discurso del miércoles en la ONU, el presidente estadunidense, Joe Biden, también reiteró su apoyo a la creación de un Estado palestino, pero sin anunciar ninguna iniciativa para relanzar las negociaciones de paz, estancadas desde 2014.