Cuernavaca, Mor. Ejidatarios de los municipios de Tlayacapan y Yautepec bloquearon ayer por ocho horas la autopista La Pera-Cuautla para exigir a la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT) construir carriles laterales para pasar a sus parcelas, que no les cobren las casetas y les paguen los terrenos que ocupó la dependencia federal desde hace 10 años para la ampliación de la vialidad.
El cierre total de los cuatro carriles comenzó alrededor de las 8:30 de la mañana, a la altura del kilómetro 25+900, entre la caseta de Oacalco y el poblado de Oaxtepec, municipio de Yautepec.
Los labriegos colocaron lazos para cerrar la autopista y colgaron dos grandes mantas en cada sentido, en los que se leían sus demandas; también atravesaron ramas y piedras para evitar el paso de automóviles.
Los comisarios ejidales Arturo Ramírez, de Tlayacapan, y Abel Molina Flores, de Santa Catarina, Yautepec, dijeron que el cierre fue porque ya falta poco para que concluya la obra de ampliación de dos a cuatro carriles y no les han construido los pasos laterales que en documentos firmados les prometieron en 2012 autoridades federales y estatales. Señalaron que para ingresar a recoger sus productos agrícolas deben pagar la caseta.
“Estamos exigiendo las laterales en esta parte del ejido de Tlayacapan para que podamos entrar a nuestras parcelas y tengamos acceso de vía, ya que desde que se inició la obra fue lo que nos prometieron”, aseguró Arturo Ramírez. Con la ampliación de la vía, la cual lleva 10 años debido a los amparos interpuestos por pobladores de Tepoztlán, han detenido las obras, pero detectaron que cerca de Oaxtepec colocaron dos casetas, aparte de la de Oacalco y la de Tepoztlán.
Por lo anterior, pidieron a la SICT aclarar ese asunto, pues afirmaron que son cuatro casetas y no sólo habrá protesta de los campesinos, sino de todos los sectores que usan esta vía, de los municipios de la zona oriente de Morelos.
Las obras ocuparon 300 mil metros cuadrados del ejido de Tlayacapan y 50 mil del ejido Santa Catarina, terrenos que a la fecha “no les han pagado”. Y si no compensan su uso, advirtieron que impedirán la inauguración de la vía.
“Parece que ya estos días quieren que opere la ampliación de la pista, pero nosotros no lo vamos a permitir hasta que cumplan”, amagó el comisario de Tlayacapan.
Respecto de la deuda por las tierras invadidas, expusieron que están pendientes los avalúos correspondientes. “Es cuestión de las valoraciones y aún falta dialogar eso, pero está en trámites desde hace 10 años”, según Abel Molina.
Explicaron que los terrenos no se los expropiaron, pero tampoco recuerdan la existencia de “un procedimiento indemnizatorio”.
Uno de los propietarios de los cultivos que quedaron del otro lado de la autopista, José Luis Alarcón, explicó que para ingresar a su parcela entra con su camioneta de reversa sobre la vialidad con el riesgo de causar un accidente, “¿y quién sería el culpable? Pues él”, sostuvo Abel Molina, tras añadir que “por eso queremos que dejen los pasos laterales y ya uno se las arregla”. Durante las casi 8 horas del cierre de la vía, que comunica al municipio de Cuautla con Ciudad de México, se formó una fila de vehículos de casi tres kilómetros, en los que quedaron varados tractocamiones principalmente.
Mientras, los automovilistas fueron desviados por policías privados y trabajadores de la caseta de peaje, por el crucero de Oacalco para ingresar a una carretera de terracería que comunica hacia Oaxtepec, donde podían entrar de nuevo a La Pera con rumbo a Cuautla.
A las 16:30 horas reabrieron la vía luego de que una comitiva del gobierno estatal acudió para concertar una cita el 27 de septiembre con autoridades de la SICT. Los ejidatarios amenazaron que de no ser atendidos sus reclamos se movilizarán de nuevo.