París. Al menos 50 personas murieron en la represión de las fuerzas de seguridad iraníes contra las protestas que estallaron tras la muerte de Mahsa Amini, arrestada por la policía iraní por no llevar el velo de forma adecuada. dijo el viernes una oenegé.
Según Iran Human Rights (IHR), una organización con sede en Oslo, el balance al alza se explica por la muerte de seis personas por disparos de las fuerzas de seguridad en la ciudad de Rezvanshahr, en la provincia de Gilan (norte) el jueves, así como otras víctimas mortales en Babol y Amol, también en el norte.
Defienden uso del velo
Miles de personas respondieron este viernes en Irán al llamamiento de las autoridades y salieron a la calle para defender el uso del velo y denunciar a los "mercenarios", tras una semana de protestas desatadas por la muerte de una joven que dejaron al menos 17 muertos.
Mientras en el extranjero las oenegés denuncian una represión "brutal" de las manifestaciones, las autoridades seguían bloqueando el viernes el acceso a WhatsApp e Instagram.
Mahsa Amini, de 22 años, fue detenida el 13 de septiembre en Teherán por vestir de manera "inapropiada" por parte de la policía moral, encargada de hacer cumplir el estricto código de vestimenta de Irán.
Tres días después murió en el hospital y su fallecimiento provocó protestas nocturnas en las principales ciudades de Irán, incluida la capital, Teherán.
En varias ciudades, los manifestantes se enfrentaron con las fuerzas de seguridad, quemaron vehículos policiales y corearon consignas antigubernamentales, según medios y activistas.
La policía arrestó a un número desconocido de personas, informaron medios iraníes. Entre ellos se encuentran el activista Majid Tavakoli y el periodista Nilufar Hamedi, según sus allegados.
Las imágenes más virales en las redes sociales son aquellas en las que aparecen mujeres iraníes prendiendo fuego a sus velos.
En Irán, las mujeres deben cubrirse el cabello y no se les permite usar abrigos cortos o ajustados o jeans con agujeros.
La muerte de Mahsa Amini, una joven que estaba bajo custodia de lapolicía “de la moral” de Irán, desencadenó protestas en todo el país, y las milicias Basij están usando la fuerza para dispersar a los manifestantes. Vía Graphic News.