Una investigación multidisciplinaria y de un grupo de derechos palestinos descubrió más evidencias que refutan la versión de Israel de que el asesinato de la veterana periodista Shireen Abu Akleh fue “un error”, pues la bala que la mató fue disparada por un francotirador, informó la televisora qatarí Al Jazeera.
La organización Forensic Arquitecture y el grupo palestino Al-Haq, examinaron el ángulo preciso en el que estaba un francotirador y concluyó que éste tenía una completa visibilidad de los periodistas del área, por lo que descartaron que el proyectil que mató a la reportera saliera de los enfrentamientos entre fuerzas israelíes y la población palestina de Jenin.
Según el análisis, para el cual Al Jazeera proveyó imágenes, el francotirador israelí disparó durante dos minutos y deliberadamente apuntó a quienes trataban de rescatar a Abu Akleh, de 51 años. El tirador disparó tres veces, con lo que liberó seis balas, tras ocho segundos disparó otras siete y una de ellas mató a Abu Akleh. Durante los dos minutos siguientes descargó su arma contra quienes trataban de acercarse a la periodista, conocida también como “la voz de Palestina”.
El 11 de mayo, Abu Akleh, con una trayectoria de 25 años como reportera de Al Jazeera, cubría el desalojo de un campo de refugiados en Jenin, Cisjordania, con un chaleco con la palabra “Prensa” claramente visible.
El ejército israelí primero negó que una de sus municiones hubiera matado a la reportera. Cuando el informe de balística demostró que el proyectil provino de un arma israelí, Tel Aviv aseguró que se trató de un “error”.
El Sindicato de Periodistas Palestinos y la Federación Internacional de Periodistas presentaron ayer una nueva demanda ante el Tribunal Penal Internacional en nombre de la familia de Abu Akleh que también incluye al periodista Alí Samudi, quien resultó herido en el mismo incidente, informó Europa Press.
“Hubo más de 16 disparos dirigidos a Shireen y a otros periodistas, incluso se disparó contra quien trató de arrastrarla hacia un lugar seguro, cuando ya había recibido el tiro que la mató”, dijo Anton Abu Akleh, hermano de la comunicadora.