En este momento, emitir deuda no representa un riesgo para el país, siempre y cuando esos recursos sean utilizados para el desarrollo social y no como en gobiernos anteriores, que eran usados para el gasto corriente, afirmó la agencia calificadora de valores Moody’s.
Carlos Díaz de la Garza, director general de Moody’s México señaló que actualmente la calificación del país se mantiene con perspectiva estable y para que ello prevalezca, se deben mantener condiciones propicias en materia macroeconómica.
“El problema es un endeudamiento como existía en el pasado, donde todo se iba directamente a gasto corriente, pago de sueldos, no inversiones productivas, ahí es donde vemos ciertos problemas de desbalances y desajustes”, apuntó.
El analista explicó que también debe haber un equilibrio en el margen fiscal para no poner en riesgo la calificación del país, es decir, conseguir mayores ingresos y gastar de una forma más adecuada y cuidadosa.
“México gasta mucho en los apoyos a Petróleos Mexicanos (Pemex), hay que cuidar eso, hablamos de mayor generación de ingresos y de menor gasto en ciertas cosas que nos pueden acarrear problemas a futuro”, mencionó el director de Moody’s durante su participación en el foro Forbes.
Apuntó que la economía mexicana actualmente está diversificada, pero depende del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en el cual existen diversas oportunidades, aunque la gran mayoría, actualmente, proviene de la relocalización de empresas.
“Tenemos que cuidar la producción en México ante todo lo que viene pasando, hemos tenido una disrupción en las cadenas de suministro; la cercanía de México con mercados como Estados Unidos y Canadá, así como ser la puerta a mercados de América Latina, nos da oportunidad de tener una planta diversificada, de invertir en distintos sectores, como en los chips. Debemos mantener la oportunidad de invertir y generar empleo”, expresó.
El director de Moody’s para México también destacó que una condición para que los planes económicos de las empresas incentiven el desarrollo en el país es que deben ser transexenales, es decir, que no cambien después de cada cambio de gobierno.
“Los planes de los bancos, de proyectos y de visión de país se deben dar de forma transexenal, por eso se deben observar temas centrales que tienen que ver con la cultura real y las perspectivas que buscamos, tales como la independencia total del Banco de México”, añadió Díaz de la Garza.