El dirigente del PAN, Marko Cortés, aseguró que todos los senadores de su partido votarán en contra de la minuta de reforma al artículo quinto transitorio de la Constitución para extender la temporalidad al año 2029, de la participación de las fuerzas armadas en labores de seguridad pública. Sin otro argumento que el de esperar el resultado de esa votación mañana, se plantó en que su partido no tiene prisa y debatirá profundamente si continúa coaligado con el PRI o no.

En conferencia de prensa, esta mañana, confirmó que ha tenido pláticas con otros priístas -se corren versiones de que ha establecido contacto con el senador priísta, Miguel Ángel Osorio Chong- con los que buscaría establecer “acuerdos más amplios”, porque él ya no confía en Alejandro Moreno Cárdenas. Durante una larga conferencia de prensa virtual, el michoacano con evidente hartazgo respondió desganado a las preguntas de los reporteros, quienes le pidieron mayor claridad sobre el futuro de la alianza con el priísmo.

Al inquirirle si no existe posibilidad de defección entre los diputados panistas, Cortés replicó: “El grupo parlamentario del PAN en el Senado ya ha manifestado a través de Julen Rementería, que estamos enteros, completos y que todos los compañeros han confirmado que votarán en contra de la fallida estrategia de la militarización iniciada, esperamos que así sea en cuenta donde los propios senadores y senadoras están comprometiéndose a votar en contra de esta reforma autoritaria.

“Esperamos que pueda ser así, que Acción Nacional ponga el ejemplo de que se hacen las cosas de manera sólida y con responsabilidad frente a los actos de autoritarismo que se están viviendo en el país”.

También al cuestionarle sobre el rumbo de las negociaciones con el PRI en Coahuila y el Estado de México, repitió lo que ha expresado en las dos últimas semanas: “todos los trabajos están suspendidos, hemos dicho con claridad que vamos a esperar la votación en el Senado de la República. Posteriormente sin prisa, convocaremos a los de nuestro partido para tomar la decisión. En Acción Nacional estamos actuando con la fuerza de la razón, con la frente en alto y con absoluta congruencia”.

Y al recordarle que Alejandro Moreno Cárdenas, señaló que sacar al Ejército de las calles es cómo sacar a los bomberos de un incendio, respondió lacónico: “está clarísimo que se perdió la confianza, no tengo que más comentarios que agregar”.

Y asi, con el efecto de golpear con una mano y sobar con la otra, subrayó que respeta la vida institucional de los partidos, pero en este caso hizo una excepción y refirió que él ya habla con otros priístas (sin mencionar nombres). “Con toda claridad, una dirigencia no es un partido y son muchos priístas con cargo sin cargo que nos han dicho que no están de acuerdo en ese contubernio que hizo la dirigencia nacional del PRI con el gobierno morenista, que no están de acuerdo en continuar la fallida estrategia de los abrazos y de la administración pública, que no están de acuerdo en lo que está haciendo su dirigencia nacional, y por ello es que estamos esperando cómo es que votan y los senadores de ese partido porque queremos construir, un proyecto lo más amplio posible con la gente no se dobla y no se vence, que no le tiene miedo al gobierno, un proyecto opositor”.

De esa forma dijo que “no hay confianza y no hay diálogo con la dirigencia nacional del PRI, nos coaligamos para tener un bloque fuerte, opositor que cuidara a México, buscar que Morena no tuviera mayoría calificada para seguir destruyendo a nuestro país, los equilibrios los contrapesos, y sabíamos el riesgo.

También aseguró que el gobierno federal pretende cooptar a los senadores de distintos partidos, y “yo le pediría a los senadores y senadores presionados por el gobierno, pues eso es lo que hay que señalar, el gobierno federal está presionando está comprando, que los senadores que se vean presionados salgan a denunciar”.