El ex senador Jorge Luis Lavalle Maury abandonó anoche el Reclusorio Norte y enfrentará en libertad el proceso penal por los delitos de asociación delictuosa, lavado de dinero y cohecho, que la Fiscalía General de la República (FGR) le imputó con base en una denuncia presentada por Emilio Lozoya Austin, ex director de Pemex, quien lo acusó de haber entregado sobornos millonarios a legisladores de diversos partidos para que aprobaran la reforma energética propuesta por el gobierno de Enrique Peña Nieto en 2013.
Lavalle comentó que ahora se dedicará a atender diversos padecimientos que se agravaron tras su detención. “Mi prioridad es mi salud y mi familia, ya que, lógicamente, este tiempo ha sido muy complicado para mi familia. Este proceso sigue y mantengo lo que dije cuando comenzó. Conservo la confianza en las autoridades y pretendo demostrar mi inocencia”, declaró tras ser liberado al filo de las 23:30 horas.
Lavalle, quien fue detenido desde abril del año pasado y permanecía preso en el Reclusorio Norte, fue señalado de haber recibido dinero de la empresa Odebrecht y que Lozoya le habría hecho llegar para que sobornara a legisladores.
Luego de varios recursos legales en los que solicitó que se le permitiera enfrentar su juicio en libertad, hasta el pasado martes el juez Marco Antonio Fuerte Tapia, con sede en el Reclusorio Norte, concedió el cambio de medida cautelar y al filo de las 21:40 horas de este viernes se le colocó el brazalete de geolocalización, con lo cual se supervisará que no se evada de la justicia, ya que los delitos que se le imputan no están tipificados como graves y no aplica la prisión preventiva oficiosa.
El panista también está impedido de viajar al extranjero y debe acudir mensualmente a firmar el libro de procesados ante la unidad de medidas cautelares.