Ciudad de México. Impulsar una reforma integral a la Ley Minera que regule el sistema de concesiones y acabe con abusos, excesos y privilegios de los empresarios del ramo es una de las prioridades para este periodo legislativo, aseguró el senador Napoleón Gómez Urrutia, durante la presentación de su cuarto informe de labores legislativas.
Resaltó que a partir del gobierno de Carlos Salinas de Gortari y hasta el de Enrique Peña Nieto se cedieron 120 millones de hectáreas, que representan 60 por ciento del territorio nacional para explotación de minas, con concesiones hasta por 100 años, lo cual ha permitido a los empresarios acaparar y especular con tierras que venden, aunque no les pertenecen, porque son de la nación.
Durante ese acto, realizado en la vieja sede de Xicoténcatl, al que asistieron el presidente del Senado, Alejandro Armenta, varios de sus compañeros de Morena y de otras fuerzas políticas, Gómez Urrutia destacó las iniciativas que ha impulsado en materia de democracia y libertad sindical y adelantó que el paso siguiente es esa reforma a fondo a la Ley Minera, que permita fortalecer al sector, con proyectos que produzcan riqueza, sin depredar el medio ambiente y las comunidades y con el respeto irrestricto a los derechos y la vida de los trabajadores.
Abusos en las concesiones
La más alarmante problemática de la legislación minera actual es el tema de las concesiones, recalcó, ya que con el apoyo de administraciones anteriores “y por el interés egoísta de los caciques de la minería”, se ha propiciado el surgimiento de “una élite de políticos y empresarios nacionales y extranjeros, donde se concentra el poder y se acapara la riqueza mineral”.
Una concesión minera en nuestra nación puede durar hasta 100 años “por la carencia de sustento válido y por la posibilidad de heredar y extender el tiempo aceptado por la autoridad”, sin importar que la mina se abandone o deje de explotarse.
La ley actual, recalcó el senador, tampoco beneficia al Estado, ya que a pesar de ser una de las industrias con mayor rentabilidad del país y con cuatro de las nueve minas más ricas del mundo, en América Latina se llega a pagar hasta 64 pesos por hectárea, mientras en México se pagan sólo 8.60 pesos.
El porcentaje que por impuestos pagan los empresarios mineros, entre los que se encuentran los hombres más ricos del país, “es muy bajo y su aportación no es simétrica respecto a las extraordinarias ganancias que generan”, por lo que se requiere fortalecer el régimen fiscal y redistributivo de esa industria.
Gómez Urrutia expuso que durante el periodo de sesiones que recién comenzó, impulsará que se establezca el Seguro de Desempleo Federal en el país, para proteger a quienes están en situación de vulnerabilidad por haber perdido su trabajo.
Desde la Comisión de Trabajo del Senado, manifestó, se trabajará en proyectos progresistas y de avanzada que modernicen la cultura laboral, y agradeció el respaldo de sus compañeros de Morena.“Tengo la certeza de que con nuestro trabajo la Cuarta Transformación continuará avanzando”, y no dejó de aludir a “la resistencia, lealtad y dignidad” de los mineros a los que “me siento muy honrado en representar”.