Ereván. Armenia y Azerbaiyán negociaron un alto el fuego para poner fin a una ronda de combates, iniciados desde el lunes, que han causado la muerte de 155 personas, informó Armen Grigoryan, secretario del Consejo de Seguridad armenio, a primera hora de ayer.
En declaraciones televisadas, Grigoryan detalló que el acuerdo había entrado en vigor cinco horas antes, a las 20 horas de antier. Horas antes, el Ministerio de Defensa de Armenia informó que los ataques de artillería habían cesado, pero no mencionó el acuerdo sobre el alto el fuego.
Un alto el fuego anterior, que Rusia negoció antier, fracasó ante la persistencia de los ataques.
Antes del anuncio, el canciller azerí, Dzheijún Bairámov, señaló al reunirse con Mijaíl Shvidkói, representante especial del presidente ruso, Vladimir Putin, para la Cooperación Cultural Internacional, que “ofreció unilateralmente un alto el fuego humanitario” a Armenia y que el interés de su gobierno no redunda en el agravamiento del conflicto y su desestabilización.
Shvidkói mostró su esperanza de que los enfrentamientos se detengan cuanto antes y se ofreció para mediar y apoyar en las relaciones de cooperación humanitaria y cultural.
Exigen la renuncia del primer ministro armenio
Miles de manifestantes salieron a las calles de la capital armenia anoche para exigir la renuncia del primer ministro Nikol Pashinyan, a quien acusaron de traicionar a su país al tratar de apaciguar a Azerbaiyán.
El anuncio de la tregua se produjo después de dos días de intensos combates que supusieron el mayor brote de hostilidades entre ambas naciones en casi dos años.
Al menos 105 militares armenios murieron, confirmó Pachinian, un balance muy superior a las 49 bajas que reportó en un inicio. Azerbaiyán, que contó 50 soldados muertos en su lado, propuso devolver a Ereván los cuerpos de 100 militares armenios.
Pashinyan señaló que las fuerzas azerbaiyanas han ocupado 10 kilómetros cuadrados del territorio de Armenia desde que comenzaron los combates.
Las dos antiguas repúblicas soviéticas están enfrentadas desde hace décadas por la región de Nagorno Karabaj, que forma parte de Azerbaiyán pero está bajo el control de fuerzas armenias étnicas respaldadas por Armenia desde que terminó la guerra separatista en 1994.