Cuatro cinturones de seguridad en calles del Centro Histórico, filtros para revisiones aleatorias de los asistentes al Zócalo, alcoholímetro las 24 horas y el despliegue de cerca tres mil 500 elementos policíacos forma parte del operativo que realizará el gobierno capitalino por los festejos patrios y el desfile militar en la ciudad de México.
En conferencia de prensa, el secretario de Gobierno, Martí Batres, destacó que después de dos años por la pandemia por covid-19, el tradicional Grito de Independencia será presencial, por lo que se esperan cientos de miles de asistentes en el Zócalo a la ceremonia oficial que encabezará el presidente Andrés Manuel López Obrador, que será precedida por el concierto que ofrecerán Los Tigres del Norte.
El subsecretario de Operación Policial, Israel Benítez, detalló que con la participación de dos mil 900 uniformados y 110 vehículos, desde las primeras horas del jueves se realizarán las acciones de supervisión y vigilancia en las inmediaciones de Zócalo capitalino, con el fin de evitar alteraciones al orden público.
“Se impedirá el ingreso de bebidas alcohólicas, así como objetos que puedan representar un riesgo para la seguridad de los asistentes, por lo que se efectuarán revisiones con equipo Garrett, de mochilas, de bolsos, esto va a ser de forma aleatoria”, expuso.
A su vez, el subsecretario de Control de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Francisco Moreno Montaño, detalló que se implementará un operativo vial en las calles aledañas al Zócalo, con la participación de 485 efectivos de tránsito, apoyados con 30 patrullas y ocho grúas, así como el sobrevuelo de un helicóptero cóndor.
Para el desfile militar, el operativo iniciará desde las 06:00 horas con 750 elementos de la Subsecretaría de Control de Tránsito, apoyados con 50 vehículos, 46 Motopatrullas y 12 grúas.
El alcoholímetro operará durante las 24 horas y se mantendrá hasta al 18 de septiembre, mientras que las alcaldías Miguel Hidalgo, Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Magdalena Contreras, Benito Juárez y Álvaro Obregón anunciaron que no habrá ley seca durante los festejos patrios.