La oferta de asilo hecha por el gobierno mexicano a Julian Assange –editor y fundador de WikiLeaks detenido en Gran Bretaña con una petición de extradición de Estados Unidos para ser juzgado por espionaje– es “oro puro” y, además, manda un mensaje a otros jefes de Estado, señalaron John Shipton, padre de Assange, y Gabriel Shipton, su hermano.

Durante el conversatorio Historia Assange: criminalización, daño y censura, realizado ayer en el Instituto Goethe en la Ciudad de México, John y Gabriel Shipton destacaron el ofrecimiento del gobierno federal, aunque aclararon que mientras Julian siga detenido no podrá aceptar la propuesta.

“La oferta de asilo para Julian es oro, es un tesoro para un hombre que ha pasado hasta ahora 13 años en detención arbitraria. La mantenemos cerca en nuestros corazones y la apreciamos. Estoy dispuesto a vivir donde sea que Julian pueda ser liberado. Si (para ello) debo vivir en la Ciudad de México, será un gran privilegio”, expresó John en entrevista con La Jornada.

Durante el conversatorio, ponderó que se trata de una propuesta de “una nación importante, por el presidente de esa nación, vale oro, por eso le damos las gracias. Entendemos el costo para el presidente López Obrador y admiramos su coraje y fortaleza”.

Al apuntar que el caso de Julian no es legal, sino político, lamentó que “la legalidad es usada por los gobiernos como un disfraz para perseguir a Julian, como un ejemplo para perseguir a cualquier periodista y organizaciones”. También subrayaron que la filtración de miles de cables de WikiLeaks ha ayudado a países a formarse como nación y entender la forma como gobierna Estados Unidos.

Luego de exponer detalles del caso que ha mantenido preso a Assange, el rostro le cambió a los dos cuando, antes de concluir el acto, entró al auditorio un mariachi para festejar el reciente cumpleaños de John. El gesto se transformó en una sonrisa al escuchar México lindo y querido, así como las respectivas Mañanitas.