Santiago. La oposición derechista suspendió temporalmente este martes su participación en una mesa transversal de negociaciones para continuar un proceso que derive en una nueva constitución en Chile, molesta por la supuesta intervención de dos ministras del gobierno del presidente Gabriel Boric.
El malestar de la oposición pausó las negociaciones que buscan definir los mecanismos y una hoja de ruta que concluyan en el reemplazo de la carta magna vigente, impuesta por una dictadura militar (1973-1990), luego de que la ministra del Interior, Carolina Tohá, declaró que “me gustaría bailar cueca con el acuerdo cerrado”, en alusión a los festejos de fiestas patrias el 18 de septiembre, lo que la oposición interpretó como que le estaban poniendo plazo a las negociaciones.
Francisco Chahuán, presidente del derechista partido Renovación Nacional, declaró que “no vamos a aceptar que una ministra nos paute”.
El malestar creció el lunes cuando los líderes oficialistas del Congreso, anfitriones de las conversaciones, informaron de los primeros acuerdos alcanzados y que según ellos incluía el órgano que escribiría la nueva constitución.
La oposición lo negó y anunció que no asistirá a un nuevo encuentro fijado para el jueves.