Kiev. El Ministerio de Defensa ruso confirmó ayer la decisión de “reagrupar” a sus tropas estacionadas en los distritos de Balaklia e Izium, pertenecientes la provincia de Járkov, para intensificar los esfuerzos en dirección a la sureña ciudad de Donietsk, al tiempo que las fuerzas ucranias reivindicaron, como parte de su ofensiva en esta región del este, importantes avances militares, entre ellos la recuperación de la ciudad clave de Kupiansk.
“Para alcanzar los objetivos declarados en la operación militar especial para la liberación de la región del Donbás, se decidió reagrupar las fuerzas rusas ubicadas en las zonas de Balaklia e Izium para aumentar los esfuerzos en la dirección de Donietsk”, apuntó el vocero de Defensa, el general Igor Konashenkov.
Este traslado, que se realizó un día después que la autoridad militar afirmó que enviaba refuerzos a Járkov, se efectuó durante tres días con el apoyo de acciones de distracción. “Se ha propinado una severa derrota al enemigo utilizando aviación, misiles y artillería para evitar cualquier daño a las tropas rusas”, aseguró Konashenkov.
El ministerio publicó un video en el que se muestra un convoy castrense con vehículos BTR-82A y artillería D-20, mucho de ellos balizados con las letras Z y V, así como el nuevo símbolo ruso, un círculo dentro de un triángulo. Precisó que en el transcurso de esta maniobra se llevaron a cabo una serie de actividades de distracción y demostración para marcar las acciones reales de las tropas.
En Donietsk, el dirigente de la región separatista prorrusa, Denis Pushilin, reconoció que la situación era “muy difícil” en esa zona, que junto a la de Lugansk conforman el Donbás, parcialmente controlada por los separatistas prorrusos desde 2014 y epicentro de la ofensiva rusa en los meses recientes.
Pushilin citó concretamente el caso de la ciudad de Limán, conquistada a fines de mayo por las tropas rusas, y dio parte de combates en “varias otras localidades” del norte de la autoproclamada república popular de Donietsk, según un video de Telegram.
“Simplemente estamos obligados a mantenernos en el Donbás. Por supuesto, vamos a ganar”, aseguró.
Poco antes, las fuerzas armadas de Ucrania informaron de la toma de la localidad de Kupiansk, en la región de Járkov, hasta ahora controlada por las fuerzas rusas, a las puertas de Izium y cerca de Lisichansk.
“¡Efectivos de las fuerzas especiales del Servicio de Seguridad Central A del servicio secreto ucranio (SBU) en Kupiansk, que fue y siempre será ucranio!”, publicó el SBU en Telegram.
El ejército ucranio recuperó en septiembre “2 mil kilómetros de territorio” que había caído en manos rusas, afirmó el presidente ucranio, Volodymir Zelensky, sin precisar si se trataban de kilómetros cuadrados y un día después de que había dicho que sólo eran mil. “Estos días, el ejército ruso nos ha mostrado lo mejor que tiene: su espalda. Después de todo, hizo lo que debía: huir”, añadió el mandatario.
Kupiansk es un punto neural para el abastecimiento logístico ruso a la ciudad de Izium, destacan analistas. Este avance se enmarca en la ofensiva lanzada por las fuerzas ucranias el pasado 29 de agosto en las regiones de Jersón y Járkov que de acuerdo con las autoridades de Kiev les permitió recuperar 30 localidades de Járkov.
Tras el anuncio de Moscú, las fuerzas ucranias entraron a Izium, indicó el diario estadunidense The New York Times. “Izium fue liberado hoy”, afirmó en una entrevista el alcalde de la ciudad, Valeriy Marchenko. Si bien él mismo aún no se encontraba en la ciudad, señaló que estaba en contacto con la policía y que los servicios de emergencia estaban trabajando para despejarla de posibles peligros antes de que los residentes pudieran regresar, reportó el medio.
Las autoridades ucranias no confirmaron la reconquista de Izium, pero el jefe de gabinete de Zelensky, Andriy Yermak, publicó una foto de las tropas a las afueras. Antes, tuiteó un emoji de uvas. El nombre de la ciudad significa “pasa”.
En tanto, el líder de la administración rusa instalada en Izium, Vladislav Sokolov, declaró que la situación en esa zona era “muy difícil”. “En las dos semanas recientes, la ciudad ha sido bombardeada por las fuerzas ucranias (…), lo que está causando graves destrucciones y muchos muertos y heridos”, declaró Sokolov a la agencia de noticias pública rusa RIA Novosti.
Por otra parte, las autoridades ucranias dejaron de aceptar unilateralmente la energía suministrada de la planta nuclear de Zaporiyia, controlada por Moscú, declaró Vladimir Rogov, miembro de la administración rusa de esa localidad, quien señaló que con ello buscan “detener la planta”.
En este contexto, la ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, llegó a Kiev en una visita sorpresa, la segunda desde que se inició la invasión, para demostrar el apoyo a Ucrania y expresó en ese sentido: “tanto tiempo como sea necesario, con suministro de armas y apoyo humanitario y financiero”.
El secretario de Estado estadunidense, Antony Blinken, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, hablaron sobre la situación en Ucrania, sin dar un reporte público.
Un total de 105 buques con unas 2.5 millones toneladas de granos salieron de los puertos ucranios en el marco del pacto alimentario, informó la agencia turca Anadolu.