Nueva York. La procesadora de pagos Visa anunció este sábado que planea comenzar a categorizar por separado las ventas en tiendas de armas, una victoria importante para quienes propugnan mayores controles y consideran que la medida contribuirá a rastrear mejor los aumentos sospechosos de aquellas ventas de armas de fuego que pudieran ser un preludio de un ataque a tiros masivo.
Sin embargo, la decisión de Visa, el procesador de pagos más grande del mundo, posiblemente enfadará a los defensores del derecho a la posesión de armas y de los cabilderos del sector, los cuales arguyen que categorizar esas operaciones segregará injustamente a una industria cuando la mayoría de las ventas que se efectúan no conducen a ataques masivos.
Visa informó que adoptará el nuevo código mercantil de la Organización Internacional de Normalización (ISO por sus siglas en inglés) para las ventas de armas, el cual fue anunciado el viernes. Hasta ese día, las ventas de armas en tiendas eran consideradas “mercancía general”.
"Tras la decisión de la ISO de establecer un nuevo código de categoría mercantil, Visa procederá con las medidas consiguientes al tiempo de garantizar nuestra protección a todo el comercio legal en la red VISA en conformidad con nuestras normas de larga data”, detalló la procesadora de pagos en un comunicado.
La adopción por parte de Visa es importante en su calidad de la mayor red de pagos y posiblemente contribuya a apremiar a Mastercard y American Express a que hagan lo mismo. Visa actúa como intermediario entre los vendedores y los bancos, los cuales decidirán si se concretan las ventas en las tiendas de armas con sus tarjetas emitidas.
Los defensores del control de armas habían logrado triunfos importantes en este frente en las últimas semanas. Las autoridades de la ciudad de Nueva York y fondos de pensiones habían apremiado a la ISO y los bancos para que también adoptasen el código.
American Express y Masctercard no respondieron de momento a las solicitudes para que hicieran declaraciones sobre el asunto.
Dos de los fondos públicos de pensiones más grandes del país, en California y Nueva York, han exigido a las principales firmas de tarjetas de crédito del país la adopción de códigos específicos de comercialización para las ventas relacionadas con armas de fuego, a fin de señalar las compras sospechosas o rastrear más fácilmente cuántas armas de fuego y municiones se venden.
Los códigos de categoría de comercialización ahora existen para casi todos los tipos de compras, incluyendo las realizadas en supermercados, tiendas de ropa, cafeterías y muchos otros minoristas.
“Cuando uno compra un boleto de avión o paga sus comestibles, la compañía de su tarjeta de crédito tiene un código especial para esos minoristas. Es de sentido común que contemos con las mismas políticas para las tiendas de armas de fuego y municiones”, dijo el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, un excapitán de policía que culpa a la proliferación de armas por la violencia mortal en su ciudad.