Banda Elástica está de regreso. La legendaria y radical banda que nos ha hecho girar desde hace 40 años con ese espléndido contubernio entre la irreverencia y la solidez instrumental ha grabado un nuevo álbum: Pandemónium, y ha ofrecido un nuevo concierto, el pasado 3 de septiembre, en el Museo del Chopo.
Nuevamente con nosotros las improvisaciones desde la impecable disciplina de la academia y los ásperos y lúdicos aromas del callejón. Trazos tan meticulosos como provocadores, agresivos por momentos, geniales la mayor de las veces. Otra manera de entender la belleza.
La diferencia es que Pandemónium fue grabado desde la distancia de la pandemia, además de que sólo cuatro de los integrantes de la banda intervienen en la grabación.
Platicamos con Guillermo González.
Ya tenían un buen rato de no sacar discos ¿verdad?
Claro, desde 2013 que lanzamos una antología de conciertos en vivo que se llama Aquí, allá y acullá. Entonces, en plena pandemia, la forzada distancia la enfrentamos con creatividad diciendo: “Bueno, en lugar de padecer la distancia, hay que aprovecharla”. Y una manera de utilizarla fue el mundo virtual. Entonces un propositor mandaba un audio a todos los demás, y los que lo quisieran intervenir lo iban mediando. Al final me mandaron todos los audios a mí e hice un trabajo de edición, mezcla y masterización. Algunos compañeros grabaron en el estudio donde mezclé y mastericé.
¿Quién proponía en primera instancia?
Las propuestas vienen fundamentalmente de Guillermo Portillo, desde Morelia, y otras son mías.
Son de los miembros originales de la banda.
Guillermo entró en 1987 y la banda se fundó en 1983. Somos de los viejos elementos.
Y Sósimo Hernández ¡no?
Sósimo también. Curiosamente, José Navarro no participó; pero los que participamos de la deformación antigua somos Sósimo, Guillermo Portillo, Luis Miguel Costero y yo. También tuvimos colaboración de Marcos Miranda y de Dante Pimentel, que además me ayudó en la producción.
A mí me hizo ruido que no estuviera José Navarro, que ya mencionaste, pero tampoco está Rosino…
Bueno, Rosino se fue a vivir a Nueva York en el año 98. Luego se hizo célebre la frase que me dijo, que jamás encontró el camino de regreso a la Banda Elástica, porque recordarás que Rosino se convirtió en director musical de Eugenia León.
Tampoco está Rodolfo Nava.
Rodolfo también se fue en 98.
¿A Noruega?.
Sí. A él también se le hizo la invitación para Pandemónium, pero no encontró las soluciones técnicas para enviar su participación de manera virtual.
Bien. Cada disco de Banda Elástica ha sido diferente el uno del otro. Cada uno con su propia propuesta musical. Pero Pandemónium lo siento particularmente denso, más espeso. Tal vez por el encierro, por el hartazgo, por la incertidumbre, por el miedo…
El disco pertenece a la tradición de improvisación libre que caracteriza al grupo. Hubo un disco que se llamó Catálogo de tiraderos, donde se incluyen improvisaciones grabadas en diferentes lugares de México y Nueva York; pero la característica de esas improvisaciones es que son en tiempo real y son presenciales, y funcionan fundamentalmente en base a la escucha. En cambio, la improvisación de Pandemónium, en tiempo virtual –aunque también funciona en base a la escucha–, tiene uno la posibilidad de intentarlo varias veces; no como en la presencial, que todo sale en el momento. Aquí tuvimos una goma de borrar para volver a intentarlo.
Y esta elasticidad del tiempo podría volver más reflexivos o cerebrales los temas, pero la banda no deja de sonar espontánea y…
Más que ser composiciones, son proposiciones. La estructura de la pieza es el audio del que lo manda primero, y como tú has dicho, los demás van interviniendo ya con más tiempo. Y no sólo eso, también el trabajo de edición, de mezcla y demás.
En general, su gran nivel instrumental ha sido evidente desde siempre, aunque por momentos se acentúe más ese academicismo. El virus en ying, por ejemplo, es muy radical y visceral, mientras el virus en yang se siente más cuidado académicamente.
Creo que es una interpretación totalmente válida, sin embargo, los dos vienen de una propuesta de Guillermo Portillo. El primero que los intervino fui yo, y ya Sósimo y Luis grabaron en el estudio contra la estructura de saxofones y guitarras.
Y habría que ver las opiniones de Sósimo Hernández, Guillermo Portillo y Luis Miguel Costero. (Continuará)