San Bartolo Coyotepec, Oax. Luego de 15 años de litigio, habitantes de este municipio conurbado a la ciudad de Oaxaca lograron ayer que Envasadora Gugar SA de CV dejara de extraer agua de un pozo. Según los lugareños, la empresa sobrexplotó el acuífero y provocó escasez.
Al mediodía del miércoles, tras un acuerdo entre autoridades estatales, municipales y la compañía, empleados de la embotelladora de agua potable desinstalaron el sistema eléctrico y un ingeniero de San Bartolo Coyotepec inhabilitó el equipo hidráulico.
El cierre del venero fue considerado un triunfo por los habitantes de esa comunidad zapoteca, quienes la madrugada del pasado lunes instalaron un plantón a las puertas de la empresa, que vendía el garrafón de 20 litros de agua purificada en 33 pesos y abastecía a las oficinas de gobierno.
El subsecretario de Desarrollo Político de la Secretaría General de Gobierno, Javier Jiménez Herrera, explicó que la noche del martes se reunieron representantes de San Bartolo, de la compañía y el gobernador Alejandro Murat Hinojosa, y acordaron la inhabilitación del pozo, del cual se extraían 30 millones 530 mil litros de agua al año.
La envasadora se estableció en la demarcación en 2002 y utilizó un poder notarial para apoderarse de un predio; en ese entonces anunció que fabricaría taparroscas, pero tiempo después inició la explotación de agua y con los años amplió sus instalaciones apropiándose de 14 hectáreas.
A la clausura del venero acudieron representantes de Gugar, de la comunidad y Jiménez Herrera, en representación del gobierno estatal, así como personal de Servicios de Agua Potable y Alcantarillado de Oaxaca (Sapao) y de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), para verificar los trabajos.
Al llegar al pozo, autoridades municipales y comunales solicitaron una revisión en el predio, pues les informaron que había más fuentes de agua, y luego se procedió a la desconexión de las instalaciones eléctrica e hidráulica.
De acuerdo con el técnico de la comunidad, Francisco Galán, la planta tiene capacidad para extraer hasta 16 litros por segundo. A su vez, el apoderado legal de la empresa, Guillermo Pérez García, aseguró que la envasadora sólo cuenta con un pozo y no seis, como se ha informado, y negó que operara a toda hora.
Señaló también que la embotelladora tiene 175 trabajadores, a quienes se les siguen pagando sus salarios y analizan cómo asignarles otras labores. Asimismo, adelantó que la compañía buscará otro lugar para establecerse.
El presidente municipal, Pablo Cruz Pacheco, agradeció la intervención del gobernador Alejandro Murat y del ayuntamiento, así como al pueblo de San Bartolo por su unidad. Expresó que la preservación del agua es una lucha justa, “no solo para las generaciones actuales, sino también para las futuras”.
En 2007, las autoridades locales iniciaron un juicio contra Gugar y ganaron en 2018; no obstante, el juez señaló que la comunidad debía indemnizar a la envasadora, lo cual fue rechazado por los pobladores.
Reprocharon que Envasadora Gugar extrajo grandes volúmenes de agua de San Bartolo Coyotepec y no se le cobró por ello, por lo cual la empresa es la que debe pagar al pueblo.