Doha. Qatar ha enfrentado muchas críticas injustas sobre la organización del Mundial que no están basadas en hechos, pero ha respondido a cualquier crítica justa, dijo este jueves el jefe de la organización del torneo, Nasser Al Khater.
En una rueda de prensa, la primera celebrada por los organizadores en meses cuando quedan 70 días para el inicio del torneo, sostuvo que la infraestructura deportiva y de transporte están terminadas y que los trabajos restantes son "estéticos".
La decisión de celebrar el Mundial en Qatar, el primer país de Oriente Medio que acoge el evento, ha suscitado críticas de grupos de derechos humanos por el trato que el Estado del golfo Pérsico da a los trabajadores migrantes extranjeros y a las restrictivas leyes sociales, según las cuales la homosexualidad y las relaciones sexuales fuera del matrimonio están prohibidas.
"Creemos que muchas de las críticas han sido injustas, no se han basado en la realidad de los hechos. Todo lo que nos ha parecido una crítica justa lo hemos asumido", dijo Khater.
Los organizadores de la Copa del Mundo ignoraron las preguntas sobre cómo las autoridades de seguridad de Qatar tratarían a los aficionados que infringieran las leyes, como el contrabando de alcohol en los estadios o la violencia.
Tampoco dieron detalles sobre qué países enviarían policías o soldados a Qatar para ayudar a asegurar el torneo que comienza el 20 de noviembre. Se espera que asistan al evento más de un millón de aficionados, muchos de ellos en avión o auto desde los países vecinos del golfo Pérsico.
Doha ha dedicado años a mejorar su infraestructura de cara al Mundial, incluyendo la construcción de siete nuevos estadios, un sistema de metro y autopistas.
Khater afirmó que el costo de la Copa Mundial de Qatar estaba "en línea o menor" que el de los tres anteriores.