Tijuana, BC., El Sky Tren Baja conectará a las ciudades de Tijuana y Playas de Rosarito con un sistema de ferrocarril elevado eléctrico, que contará con ocho paradas y cubrirá una ruta de 21 kilómetros, desde la entrada a México por el paso internacional de San Ysidro hasta el municipio de Rosarito.
La obra, en la cual se invertirán entre 500 y 600 millones de dólares para adquirir vehículos, así como 3 mil millones de dólares en infraestructura, empezará en tres meses, anunció la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda.
El proyecto presentado ayer, de inversión privada en su totalidad, incluye una estructura elevada de concreto armado, con dos carriles en ambos sentidos para el servicio de transporte público.
Ante unas 600 personas, Alfredo Acosta, presidente de la firma Jeca Railway Corporación, que se encargará del proyecto, presentó los primeros avances de los trabajos.
El anuncio se realizó dos semanas después de que el Periódico Oficial del Estado de Baja California publicó, el pasado 19 de agosto, que la empresa creará un fideicomiso tras recibir el aval de la Comisión Especial de Concesiones el 30 de julio de 2021, y entregó el plan maestro de obra el 30 de agosto.
Según Acosta, el tren elevado beneficiará a unas 500 mil personas, “no sólo por los empleos directos que vamos a generar, que van a ser entre 8 mil y 10 mil, y siete veces más indirectos”.
Se prevé que el sistema sea utilizado diariamente por 70 mil personas, sin incluir turistas. También se plantea que las estaciones cuenten con baños, centros culturales y áreas verdes, entre otras instalaciones.
“Todo esto es inversión privada; no hay ni un gasto para el estado, ni para el municipio. Todos nuestros desarrollos son de energía limpia, ya que todos nuestros sistemas de material rodante son cero contaminantes, tanto en su mantenimiento como en su operación”, afirmó el presidente de Jeca.
El acuerdo entre Jeca y el gobierno del estado también incluye una flotilla de camiones eléctricos. Los primeros seis ya están listos, y los que restan se encuentran en fase de ensamblado.
La mandataria morenista Ávila Olmeda expuso que si bien no se invertirá dinero público en esta obra, sí implicará la entrega de terrenos propiedad del estado o de los municipios donde se construirá el tren.
Además, se pedirán al gobierno predios necesarios para el proyecto, que pasará principalmente por tierras estatales y municipales, aunque 5 por ciento correrá por territorios federales.