Brasilia. La octava edición del festival de música Rock in Rio, en la ciudad de Río de Janeiro, rindió ayer homenaje al cantautor, instrumentista, productor musical y ex ministro brasileño de Cultura Gilberto Gil.
Gil, quien actuó en la primera edición del certamen y es un verdadero patrimonio cultural de Brasil, cerró el primer fin de semana con un espectáculo.
Junto a algunos miembros de su familia, el artista, quien en junio cumplió 80 años, cantó en su presentación sus grandes éxitos, como Esperando na janela, A Paz y Palco.
“Recibirlo es un honor, más aún si pensamos en la posibilidad de rescatar tantos recuerdos increíbles de 1985”, afirmó recientemente Zé Ricardo, director artístico del Palco Sunset do Rock in Rio, donde actuó el autor de Andar com fé.
Señaló que Gil estuvo en la primera edición, la cual marcó generaciones. “Su trayectoria en la música es inmensa y representará el legado de todos nuestros grandes nombres de la música popular brasileña)”, sostuvo.
Por ello, agregó Ricardo, este homenaje no se limitará a una sola jornada. “Durante los siete días del encuentro (del 2 al 4 y del 8 al 11 de septiembre) tendremos proyecciones en las grandes pantallas del escenario que contarán su historia a través de la música”.
Ayer también subieron al Palco Sunset el rapero Emicida y las cantantes nacionales Luisa Sonza y Marina Sena.
La principal atracción de la velada en el principal escenario fue el astro canadiense del pop Justin Bieber, quien aceptó mantener su actuación de este domingo, pero canceló los siguientes espectáculos.
Según el columnista Leo Dias, del portal Metrópoles, el artista, tras una larga discusión con el equipo del festival, admitió presentarse, pero dio por terminada su gira debido a problemas de salud mental.
De acuerdo con el comunicador, círculos confiables indicaron que Bieber pasa por un momento sicológico delicado y suspendió los otros conciertos programados para Chile, el 7 de septiembre, Argentina, el 10 y 11, y Sao Paulo el 14 y 15.
La legendaria banda británica Iron Maiden sacudió el viernes a Río en una jornada metalera que inauguró el afamado festival de música, suspendido en años anteriores por la pandemia de covid-19.