Guadalajara, Jal. La Policía de Guadalajara informó que durante la noche del viernes y madrugada de este sábado entre mil 500 y 2 mil jóvenes, la gran mayoría menores de edad, asistieron a una mega fiesta de bienvenida con motivo del ingreso a nivel bachillerato de al menos 25 prepas de la zona metropolitana de Guadalajara, la cual fue clausurada tras el reporte de vecinos.

Aunque no se informó sobre percances mayores, se decidió clausurar el lugar, ubicado en la colonia Huentitán el Alto, en Guadalajara, porque se vendía cerveza a los jóvenes sin importar su edad y los decibeles de la música superaron los máximos permitidos.

La Policía de Guadalajara informó que desalojó el sitio tras recibir varios reportes a partir de las 10 de la noche del viernes, incluidos señalamientos de que hubo una riña campal, una persona atropellada y varias más intoxicadas, todo lo cual no fue comprobado.

"Oficiales acudieron y en el inmueble se escuchaba música a volumen alto y un portón cerrado de donde entraban y salían jóvenes. Los policías solicitaron el ingreso a personas que aparentaban ser menores de edad que estaban custodiando el ingreso, pero se lo negaron", informó la dependencia municipal de seguridad.

Según el mismo reporte, afuera de la finca había incluso una ambulancia que llegó al sitio alertada por los reportes, pero igual que a los policías no se les permitió ingresar para verificar si en efecto había personas intoxicadas.

La presencia policial y sus amagos por ingresar lograron que muchos jóvenes comenzaran a retirarse, aunque según se informó la clausura del sitio se dio hasta las 3 de la mañana, cuando el sitio terminó de ser desalojado.

Dicha clausura se dio porque el denominado operativo Decibeles midió que fueron superados los niveles de ruido permitido. Además personal de Inspección y Vigilancia acudió y levantó un acta por no contar con licencia, por la realización del evento sin permiso y por venta de cerveza a menores de edad.

Los muchachos pagaron por ingresar 70 pesos por persona, además de 50 pesos de descorche, sin contar lo que se gastaron por la compra de cerveza en el interior.

Pese a los reportes vecinales, las autoridades no confirmaron que hubiera ni personas intoxicadas ni decomiso de drogas.