Proyecto Uno es la agrupación responsable de que durante los años 90 se escucharan canciones como El tiburón y Está pegao en múltiples entornos latinoamericanos. Sus canciones contribuyeron a construir el panorama sonoro que primó en países como España, Puerto Rico, Chile, República Dominicana, Colombia, Ecuador, Costa Rica y México. Ante ese pasado, Nelson Zapata, líder y fundador de la banda de merenhouse, se siente agradecido.
“Yo diría que es una bendición, porque no todo el mundo puede darse el lujo de tener canciones que se conviertan en clásicos, y que tanta gente los disfrute”, señaló en entrevista. “Cada persona que hace música se puede considerar bendecida por tener resultados como los que hemos obtenido con estas canciones”.
La agrupación, establecida en Nueva York y de origen panameño, cumple 33 años y continúa haciendo música y presentándose en diversos escenarios. Esa longevidad tiene que ver, para Nelson Zapata, con su manera de idear su labor. “Cuando uno ha hecho las cosas no por tendencia o porque está de moda tal ritmo, sino porque uno mismo hizo paso de la creación de sonidos que uno disfrutaba, empieza a mezclar, coordinar todos esos elementos de funk, dance, disco, rap, hip-hop, merengue, tropical y ponerlo en una sola pieza, es algo que enriquece lo musical, y es lo que le ha dado tanta fuerza a todo lo que hacemos”, explicó.
Canciones como 25 horas, Latinos y Another Night siguen siendo no sólo recordadas, sino escuchadas aún tras varios años. Para Nelson, la vigencia está relacionada con su manera de producir los temas. “Se hizo de una forma en la que se mezclaban varios elementos, y en que podías bailar como quisieras. Por eso es que ha perdurado tanto también; fue hecha con tanta calidad, modestia aparte, que puedes poner una canción de Proyecto Uno y suena actual. También varias generaciones la han ido pasando a sus hermanos menores, a sus hijos”, sostuvo el vocalista.
De alguna forma la manera de hacer música de Proyecto Uno estableció antecedentes y abrió nuevos caminos a la creación musical. “Con nosotros se creó una generación que iba a hacer cosas diferentes. Cuando empezamos, muchas veces no teníamos un género musical que identificara lo que hacíamos. Me acuerdo que con Está pegao, la Asociación de cronistas y espectáculos nos dio un galardón, y fue la mejor canción rock del año. No somos para nada rock, pero solamente había salsa, balada y pop”, recordó Nelson Zapata.
Comprensión a lo que se sale de lo establecido
Por eso de la época actual, el líder de Proyecto Uno disfruta la forma en que el abanico de géneros se ha abierto a partir de la mezcla. “Ya hay más comprensión a algo que se salga de la casilla de lo que eran los ritmos tradicionales. Ya se pueden hacer muchas fusiones, muchos híbridos. Cada día van saliendo más fusiones para hacer música diferente, que es lo importante”, agregó.
Sin embargo, también existen posturas en el panorama musical actual con las que el intérprete de El tiburón no está de acuerdo. En la actualidad Zapata es padre de una niña de 9 años a quien le preocupa exponer a ciertos temas ampliamente abordados en la música urbana. “Me he encontrado con barbaridades de letras. Eso es lo que terminas escuchando. Entonces dije, ‘bueno hay que hacer algo que sea consumido también por los niños’, ya que la mayoría es enfocado al adulto”, detalló.
“Sé que los artistas que hacen eso en su defensa dicen que el deber de los padres es educar a sus hijos para que no lo hagan, pero cuando tú estás en un restaurante, en un centro comercial, y tocan esas cosas ya uno no puede controlar lo que ellos escuchan. Entonces ahí es que uno dice: ‘caramba, ojalá y hubiera un poco más de filtro en las canciones que se hacen actualmente’”, añadió.
El resultado de su actual forma de ver la vida fue Música feliz, tema nuevo incluido en su más reciente álbum. Zapata quería “que fuera una canción que la escuches con toda la familia, con tus hijos y no sientas miedo de no saber con qué van a salir, y esa fue la idea primordial”.
Música feliz está incluida en Aniversario, que, además, de nuevos temas contiene también clásicos de Proyecto Uno. “Queríamos hacer, celebrando nuestro aniversario, una recreación de los temas clásicos pero modernizando, manteniendo la esencia, pero metiéndole ciertos matices diferentes, más actuales, para compenetrarnos con la juventud y que se conecten con nuestros clásicos”.
Traer a esta época sus canciones más conocidas, “ha sido fácil adaptar un poco de esos ritmos modernos y adaptárselos a los temas clásicos. Fluyó de forma muy natural, porque cuando se empezaron a hacer esos temas uno estaba pensando afuera del molde”, concluyó.