Alrededor de 20 diferentes tipos de información obtienen las plataformas digitales de sus usuarios –como datos fiscales, bancarios, fotos, video, dirección IP, contraseñas de otras aplicaciones– y los comparten con otras firmas, autoridades judiciales y proveedores, entre otros, reporta el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
Detalla que la mayoría de las plataformas digitales recopilan el uso de la batería, tipo y versión de sistema operativo, dirección IP, nombre de dominio e identificadores del usuario. Las que ofrecen servicios digitales de transporte y traslado de mercancías (como Uber o Didi) recaban marca, modelo, color y documentación del vehículo, así como RFC y documentos de identificación gubernamentales de las y los conductores.
Las aplicaciones no sólo logran permisos para acceder de manera directa a la información personal de los usuarios, sino que la comparten con terceros, socios externos, autoridades judiciales, afiliados, proveedores de servicios, socios de confianza comerciales y de marketing, explica el IFT.
En la mayoría de las plataformas no se establecen tiempos definidos para que se elimine la información de usuarios una vez que dejan de hacer uso de ellas, advierte el organismo en el tercer Informe de privacidad de la información de los usuarios en el uso de servicios digitales.
Entre las aplicaciones de mayor uso, Facebook obtiene hasta 19 tipos de información distinta (fotos y cámara, ubicación, registro de llamadas…), lo mismo que Twitter. Instagram, YouTube y WhatsApp acceden a 17, y Tik Tok a 18, de acuerdo con el análisis del organismo regulador. Todas comparten esos datos con terceros.
Hay dos maneras en que las plataformas logran el aval de los usuarios para acceder a su información: la voluntaria y la condicionada.
La manera voluntaria se da cuando el usuario brinda su información de manera personal, o concede permisos sobre las funciones en sus dispositivos cuando los servicios digitales solicitan esos accesos, por ejemplo, nombre, correo electrónico y ubicación GPS, entre otras.
La condicionada es cuando el usuario se ve “forzado” a proporcionar su información “voluntariamente” para poder usar algún servicio o tener acceso a alguna función específica.
El organismo recomienda revisar periódicamente las configuraciones de privacidad de las aplicaciones utilizadas.