Buenos Aires., El bloque de diputados del Frente de Todos (FdT) repudió ayer la represión que ejerció la policía de Ciudad de Buenos Aires contra el legislador Máximo Kirchner y manifestantes que resultaron heridos y detenidos en el contexto de la violencia contra una multitudinaria manifestación en solidaridad con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kichner, contra quien la fiscalía pide 12 años de prisión y su inhabilitación de por vida en una causa en la que no se ha presentado ninguna prueba válida.
A medida que pasaron las horas ayer, comenzaron a aparecer imágenes, filmaciones y audios sobre la represión que evidencian una trama mafiosa que se ocultaba en la operación preparada para actuar contra los manifestantes que desde hace ocho días permanecen y se renuevan en un simbólico abrazo a la casa de la también ex presidenta (2007-2015).
Este domingo se pudo ver claramente un video que se viralizó y muestra empujones y golpes de los policías al diputado Máximo Kircher, quien el sábado intentaba llegar hasta el departamento de su madre, la vicepresidenta, aislada por una decisión ilegal e inconsulta del jefe del gobierno capitalino Horacio Rodríguez Larreta.
En el video se escucha claramente que un policía lo interpeló al reconocerlo y lo insultó de tal manera que la indignación se expresó durante todo el día y sin convocatoria alguna, nuevamente centenares de manifestantes, jóvenes, mujeres, familias y ancianos comenzaron a llegar a su vigilia cotidiana “para cuidar a Cristina”, que al mediodía bajó a saludarlos antes de subir a un automóvil. La agresión puede verse en el portal de Página/12: https://bit.ly/3PQA8DG
Si la noche del sábado la emoción era colectiva, ayer también lo era la indignación al conocer audios policiales en los que queda claro que identificaron a Axel Kicillof. Un policía informó a otro de la presencia del gobernador de la provincia de Buenos Aires y su jefe le respondió “mire señor, el gobernador de la provincia es un manifestante más en este momento. Vamos a trabajar con el personal urbano de la manera correcta, está formada la línea y vamos a aguantar”.
Después dio instrucciones de “contener al personal y el hidrante va a tomar posición por detrás del personal policial y va a trabajar a las órdenes de esta sala”. Esto fue antes de que comenzaran a arrojar chorros de agua, gases lacrimógenos y gas pimienta, lo que fue como una orden para los que salieron a cazar manifestantes, entre ellos el diputado Matías Molle, del FdT, por la Provincia, el ex diputado por La Matanza Facundo Tignanelli, el dirigente de La Cámpora Fabián Conu Rodríguez, la cartonera, activista social y diputada nacional por la provincia de Buenos Aires, del Frente Patria Grande, en el FdT, Natalia Zaracho y la diputada nacional Cristina Álvarez Rodríguez, la familiar más cercana de Eva Duarte de Perón (Evita).
De acuerdo con el informe de las autoridades de Buenos Aires “la única respuesta de las fuerzas de seguridad ante la gran violencia desatada contra ellos fue a través del camión hidrante, utilizando sólo agua”, aunque hubo heridos por balas de goma.
Es evidente que este ataque estaba preparado desde la mañana contra los manifestantes que –como todos los días–, rodearon el edificio, pero no se contó con la decisión de último momento, cuando los actos en dos plazas públicas se levantaron para marchar todos hacia una plaza cercana al edificio donde habita la vicepresidenta y la multitud era imposible de contener.
En esta situación los mismos manifestantes demostraron que durante la mañana un camión de la municipalidad trasladó dos contenedores cargados de escombros, como lo hacía la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich, cuando los dejaba llenos de piedras en algunas protestas grandes en el Congreso, en tiempos del gobierno derechista de Mauricio Macri (2015-2019), y mandaba agentes infiltrados que tirando piedras armaban el caos y se desataba la represión. Ahora no pudieron hacerlo.
Por esa razón se exige hoy al gobierno de la ciudad que “identifique a los policías comprometidos con la acción represiva contra Máximo” mientras se evalúan realizar acciones legislativas, políticas y legales correspondientes”, pero también una investigación sobre todo lo sucedido.
En realidad la mayor violencia fue dejar sitiada a la vicepresidenta del país, enviar equipos y policías suficientes, incluyendo camiones para llevar detenidos, y a la infantería.
De todo el mundo continúan llegando mensajes de apoyo a la ex mandataria argentina, y repudiando la represión policial. Lo cierto es que se ha producido un giro en la situación del país, incluso el discurso de todos los manifestantes entrevistados dan cuenta de la nostalgia y la revalorización de todo lo que se había logrado en tiempos de los gobiernos kircheristas, que arrancaron con la administración del fallecido Néstor Kirchner (2003-2007).
Todo eso que parecía olvidado apareció repentinamente en escena, como si hubiera un efecto de maduración política que nadie ni siquiera imaginaba. No hay que dormirse sobre los laureles. Hoy más que nunca debemos recordar el peronista grito de “patria sí, colonia no” que se leía en una pancarta que agitaba una joven en medio de la multitud.