Los usuarios de las Sociedades Financieras Populares (Sofipos), en la actualidad ahorran más recursos y no solicitan crédito, dado que estas entidades no bancarias han aumentado sus tasas de interés y los rendimientos que dan en productos de ahorro compensan los altos niveles de inflación, afirmó David Romero Morfín, presidente de la Asociación Mexicana de Sofipos (Amsofipo).
Resultado de las presiones inflacionarias y el alza en las tasas de interés del Banco de México (BdeM), las Sofipos ahora están enfocadas en subir sus tasas de retorno a las personas que cuentan con un servicio de ahorro; al mismo tiempo que las tasas de los préstamos no han subido ni subirán, al menos, por lo que resta del año, dijo el directivo en entrevista con La Jornada.
“Nosotros podemos captar y prestar, hay un ciclo económico en el que las personas gastan menos y no es tan necesario el crédito, lo que crece son los ahorros. Hay un manejo responsable de los recursos ante una circunstancia complicada, lo que vamos a ver con la apertura del mercado es la demanda de financiamiento”, apuntó.
Romero Morfín expuso que “en los hechos, en la captación, estamos subiendo las tasas como lo hace el BdeM, es decir, estamos pagando más a las personas que tienen sus ahorros con nosotros, se están viendo beneficiados, y por el lado del crédito nos hacemos más eficientes y no hemos subido los precios del crédito en beneficio de los clientes”.
Al cierre de la primera quincena de agosto, la inflación se colocó en 8.62 por ciento, lo que significó un nuevo máximo desde la segunda quincena de 2000, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En este contexto, los productos que se ofrecen en el sector financiero básicamente no compensan la inflación, pues los bancos, en promedio, ofrecen rendimientos de 6.5 por ciento en sus productos de ahorro y otros mecanismos más seguros no alcanzan ni 4 por ciento.
“Pagamos tasas reales, si nos comparamos con las de otros sectores estamos por arriba, porque actualmente estamos pagando por encima de la tasa del banco central (más de 8 por ciento) y dando recursos reales a los ahorradores”, precisó Romero.
Refirió que, de cara a las festividades y a los altos niveles de movilidad en los últimos meses, es de esperar que las tendencias cambien y repunte la demanda de financiamiento en los sectores popular y productivo.
En específico, dijo, el sector manufacturero y el relacionado con los servicios es de los que más movimiento han tenido y los que, por tanto, requerirán más financiamiento para afrontar la demanda de insumos.
“Queremos que se entienda que somos un sector sólido que cuenta con los recursos suficientes para prestar y con la solvencia y la liquidez que se nos solicita”, agregó.