El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó ayer que comprende y respeta la posición de los familiares de los 10 mineros atrapados en la mina El Pinabete, en Coahuila, y afirmó que su instrucción es que “no nos demos por vencidos” en las labores de rescate.
Consultado en su conferencia mañanera sobre el rechazo de los familiares a una propuesta hecha por la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, que implicaría excavar el terreno para llegar a los mineros atrapados en el pozo de carbón desde el 3 de agosto, lo que tomaría entre seis y 11 meses, el mandatario señaló que se dialoga con ellos y que los técnicos rescatistas buscan la mejor opción para continuar la operación.
“Es muy triste, entendible, la situación de los familiares de los mineros atrapados. Merecen toda nuestra consideración y respeto. Son situaciones muy graves, lamentables”, dijo en Palacio Nacional.
“Ayer se les consultó y ellos no están de acuerdo. No es que no quieran rescatar a sus familiares, es que les parece mucho tiempo”, señaló.
Al preguntarle si se indemnizará a los familiares, contestó: “Sí, pero ahora lo más importante es el rescate. Desde luego que hay una indemnización, pero ese no es el tema”.
Agregó que no se ha perdido la esperanza de rescatar a los mineros. “Eso nunca, eso jamás, hasta que se tengan las evidencias” y que mientras esto sucede los técnicos exploran “si se puede acortar el tiempo con más extracción de agua”.
Agregó que “se estaba buscando qué opción es la mejor y la instrucción es que no nos demos por vencidos. No va a suceder lo de Pasta de Conchos, en donde se decretó que no había ya ninguna posibilidad de recuperar a los mineros. Nosotros no, ahí vamos a estar”.