Pekín. La sequía que afecta a China ha secado algunos ríos, incluidas partes del Yangtsé, lo que afectó la energía hidroeléctrica, detuvo el transporte marítimo y obligó a las principales empresas a suspender operaciones.
El gobierno chino emitió el viernes pasado una alerta de sequía a nivel nacional debido a que se pronostica que la ola de calor en el suroeste de China se extienda hasta septiembre.
El flujo de agua en el tronco principal del río Yangtsé, que proporciona agua potable a más de 400 millones de personas y es la vía fluvial más importante del país, está más de 50 por ciento por debajo del promedio de los últimos cinco años.
La pérdida de flujo al extenso sistema hidroeléctrico de China ha “agravado la situación” en la provincia de Sichuan, que obtiene más de 80 por ciento de su energía de la hidroeléctrica.
La demanda de electricidad ha aumentado 25 por ciento este verano, informaron medios locales.
La semana pasada, Sichuan suspendió o limitó el suministro de energía a miles de fábricas y racionó el uso público de electricidad debido a la escasez. No hubo ayer un anuncio público de la extensión del racionamiento pero, según reportes de prensa, el gobierno notificó a las empresas que continuará la medida.
Las fábricas en Sichuan que producen microprocesadores, páneles solares, componentes de automóviles y otros productos industriales tuvieron que cerrar o reducir su actividad la semana pasada con el fin de conservar energía para los hogares, ya que la demanda de aire acondicionado aumentó con temperaturas hasta de 45 grados Celsius. Se apagaron el aire acondicionado, los ascensores y las luces en oficinas y centros comerciales.
Mientras, el gobierno municipal ordenó el cierre de algunos centros comerciales en Chongqing, vecina a Sichuan, durante la mayor parte del día para reducir la demanda de electricidad, informó la emisora estatal CCTV, al limitar el horario de apertura de 4 de la tarde a 9 de la noche.
En Shanghái, la ciudad apagó ayer y hoy las luces decorativas de los alrededores de su famosa avenida Bund y de la otra orilla del río Huangpu, en parte del barrio de Lujiazui.
El gobierno dice que este verano es el más cálido y seco de China desde que comenzaron los registros en 1961. Los medios estatales informan que las autoridades buscan aliviar la escasez de agua y energía al disparar productos químicos a las nubes para intentar generar lluvia.
Los incendios forestales en las afueras de Chongqing son el último flagelo resultante del calor y la sequía.
Más de mil 500 residentes fueron trasladados a refugios, mientras alrededor de 5 mil civiles y militares fueron movilizados para apagar las llamas y se han enviado helicópteros para arrojar agua.
Los gobiernos de Sichuan y la provincia vecina de Hubei informaron que miles de hectáreas de cultivos se han perdido. Las autoridades adoptarán medidas de emergencia para “garantizar la cosecha de cereales de otoño”, que representa 75 por ciento del total anual de China, informó el ministerio de Agricultura.
Por otra parte, Portugal continúa combatiendo varios incendios, mientras las inundaciones por las lluvias monzónicas en Pakistán han matado a 777 personas en los últimos dos meses.