Hanoi. La relación bilateral entre Vietnam y México no se trata de un proyecto exclusivamente económico; implica también promover el cambio de la percepción en el círculo literario vietnamita, donde a México se le aprecia por tres cosas: “sombreros, tequila y Octavio Paz”, expresó Alejandro Negrín Muñoz, embajador de México en la República Socialista de Vietnam, en reciente diálogo con La Jornada, en la cual añadió que la relación entre ambos países tiene “enorme futuro a partir de un anclaje institucional que, si bien por ahora es limitado, es sólido”.
El embajador llegó a ocupar la embajada de México en un momento significativo en Vietnam: en la fiesta del Tet o Nuevo Año Lunar 2022. Arribó al cargo con el propósito de llevar la diplomacia bilateral “con herramientas de trabajo concretas, que reflejen resultados visibles”, para lo cual cuenta con una experiencia diplomática de 35 años en siete países, Polonia, el último; en la Secretaría de Relaciones Exteriores fue director general de Relaciones con Europa, así como en Derechos Humanos, y fue titular del Instituto Cultural de México en Washington.
Durante la charla con este diario, Negrín agregó: “Tenemos que reconocernos como naciones de tradiciones milenarias, pero también con gran reserva cultural para el futuro”, por lo que, dijo, visualiza proyectos académicos y culturales que serán piedra angular de vínculos a corto y mediano plazos.
Destacó el diálogo entre los departamentos de lengua hispánica de importantes universidades y la Academia de Ciencias de Vietnam, que se mantiene con apoyo de la Universidad Nacional Autónoma de México y el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Alejandro Negrín Muñoz encabeza un proceso de dignificación de una excelente réplica de cabeza olmeca “que encontramos en el techo de un museo en Vietnam”.
En cuanto a gastronomía, refirió que “se trabaja en la proyección de la tradición culinaria de nuestro país con restaurantes mexicanos de Hanoi, que cada día son más”.
Para el diplomático, “el punto de encuentro entre México y Vietnam es la lucha por la soberanía; es un tema concreto, que se proyecta en la forma en que ambos países nos posicionamos en la sociedad internacional”. Añade que la relación entre ambos países tiene “enorme futuro a partir de un anclaje institucional sólido”.
Lazos de 47 años
Con indicadores a la mano, logros de un semestre, el embajador Negrín augura que el vínculo económica entre México y Vietnam “está a punto de dar un salto muy importante”, a causa de la dinámica de crecimiento financiero reciente y pujante del también considerado Tigre de Asia y, con ello, la relación de México con la región de Asia Pacífico, zona predominante en este siglo. Negrín resalta un caso: las relaciones entre México y Vietnam ejemplifican el funcionamiento del Tratado Integral Progresista de Asociación Transpacífica, que entró en vigor hace tres años, por lo que hoy México es el mercado más importante para Vietnam en América Latina.
Tomando en cuenta la relación de embajadas de México con el país del Tío Ho, que data de 47 años, el embajador Negrín destaca el actual diálogo político constante, el trabajo regular con el comité de cooperación económica, el excelente apoyo a escala multilateral y las “experiencias históricas similares”.
En tiempo de poscovid-19, la llegada del embajador Negrín a Vietnam propició una intensa dinámica diplomática bilateral, con resultados visibles: el encuentro virtual, el 18 de julio pasado, entre el presidente de la Asamblea Nacional de Vietnam, Vuong Đình Hue, y la presidenta del Senado mexicano, Olga Sánchez Cordero, con el fin de estrechar relaciones de apoyo en ambas instituciones; la primera misión empresarial a México en la historia de las relaciones bilaterales con titulares de más de 25 empresas vietnamitas, y, el 19 de julio, las consultas políticas-técnicas entre los ministerios de Relaciones Exteriores de ambos países.
El experimentado diplomático destaca “la gran prioridad compartida que tenemos México y Vietnam es avanzar hacia una asociación integral entre los dos países. Esta es una propuesta que formuló Vietnam hace poco tiempo, y trabajamos en ese propósito. El fundamento de esa asociación es claro, pero no exclusivamente económico”.
Desde la entrada del Tratado de Integración Progresista de Asociación Transpacífico en 2019, el comercio entre México y Vietnam ha crecido de manera explosiva. En 2021 se llegó casi a 9 mil millones de dólares de comercio bilateral, muchísimo más de lo que México comercia con países de América Latina o con la mayoría de las naciones europeas en lo individual.
México es, por mucho, el principal mercado para los productos vietnamitas en América Latina; es decir, es el principal cliente y comprador de productos de la nación asiática en ese continente.
“Prioritario en consecuencia es equilibrar nuestro comercio, que actualmente registra un enorme déficit para México, por lo que trabajamos intensamente para lograr un mejor acceso para los productos mexicanos en Vietnam en sectores como las carnes, productos agroalimentarios, pesqueros, químicos y farmacéuticos, entre otros.”
Negrín Muñoz resaltó que no se trata de un proyecto exclusivamente económico, sino que visualiza un plan bilateral de corto y mediano plazos que debe comprender todos los ámbitos de la relación.
“Claro que lo anterior nos puede servir de base”, pero “necesitamos trabajar muchísimo para conocer lo que ambos países somos en la actualidad”, lo cual implica promover el cambio de la percepción de nuestro país, por ejemplo, en el círculo literario vietnamita, donde a México se le aprecia por tres cosas: “sombreros, tequila y Octavio Paz”.
De la parte mexicana queda claro que la percepción está dominada por lo que en Vietnam se conoce como la guerra americana que culminó con la reunificación del país; es decir, el triunfo de Vietnam en abril de 1975 contra la ocupación estadunidense; por ello, el personaje más conocido en México es el presidente Ho Chi Minh, “uno de los grandes líderes del siglo XX y ejemplo de la diplomacia pública en el mundo”, expresó Negrín Muñoz.