La derrama económica para la Ciudad de México, estimada en más de 4 mil millones de pesos, derivada del movimiento que se genera en el sector escolar, podría verse eclipsada “si las autoridades no generan programas de agilidad vial que permitan a los padres de familia llegar a tiempo a las escuelas y a sus centros de trabajo”, aseguró Gerardo López Becerra, presidente del Consejo para el Desarrollo del Comercio en Pequeño y la Empresa Familiar.
Resalto que para el comercio en pequeño que se ubica en la capital, una de las principales interrogantes “es si se podrá evitar el caos vial que, se prevé, generará el desplazamiento a los planteles educativos de más de un millón y medio de alumnos”.
Alto costo, obstáculo
Para los comerciantes en pequeño y padres de familia que buscan los mejores precios y productos para el inicio de clases, “el incremento en el costo de los artículos escolares representa uno de los principales obstáculos para realizar su trabajo”.
Hace tres años, el paquete básico de artículos “podía comercializarse hasta en 150 pesos; hoy, el mismo paquete no puede comercializarse en menos de 200 pesos, lo que representa un incremento de más de 30 por ciento”, indicó.
Además, “se tendrían que agregar los incrementos en los precios de productos básicos, transporte, ropa y calzado, así como la adquisición de cubrebocas y gel antibacterial, productos que se han hecho indispensables para la asistencia a clases presenciales”.