Tijuana, BC., Cuando alguien “se excede, no sabe autolimitarse, se afecta a sí mismo”, señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador, al comentar la acusación del senador Jaime Bonilla en torno de un presunto acuerdo roto entre la gobernadora, Marina del Pilar Ávila Olmeda, y un cártel de la droga, como detonante de la violencia del 12 de agosto.
Si bien dijo que “en lo personal le tengo mucho afecto a Jaime porque siempre nos ha apoyado”, pidió “no confundirse”, porque la política “no es de amiguismo o nepotismo, mucho menos de corrupción, el Presidente de México le tiene respeto y afecto, pero lo mismo puedo decir de la gobernadora.. la considero una mujer buena, íntegra, con principios”, y negó categóricamente las acusaciones del senador.
De hecho, López Obrador abrió la mañanera, realizada ayer en la Segunda Zona Militar, en la parte vieja de Tijuana, con una expresión de respaldo para Ávila Olmeda; recordó que fue electa en un proceso democrático y por lo tanto es legal y legítimamente la gobernadora, y “cuenta con nuestro apoyo y aún más, nuestra simpatía. El gobierno federal la va apoyar siempre”.
Acto seguido la mandataria le agradeció el apoyo de hace una semana, cuando “algunos cobardes quisieron asustarnos y se toparon con un brazo poderoso, porque todas las autoridades formamos un mismo frente”.
De paso le dio un raspón al ex gobernador, sin nombrarlo, al aludir a “quienes de manera irresponsable buscaron lucrar políticamente, difundiendo noticias falsas y generando alarmismo”. Ello porque PSN y Canal 45 (televisión abierta, ésta última), presentaron un viejo mensaje del crimen organizado (en otro estado) ordenando toque de queda.
El “pantallazo”, sumado a la quema de 28 vehículos, entre unidades del transporte público, particulares y tractocamiones, provocó incertidumbre en una ciudad que ya sufre por la delincuencia en sus calles.
El pueblo “pone en su lugar a quien se excede”
Casi al final de la conferencia, la prensa local insistió al Presidente “de lo delicado de las acusaciones que Bonilla hizo en la tribuna de la Comisión Permanente”, y López Obrador intentó relativizar, bromeó, diciendo que el enfrentamiento entre la gobernadora y el senador es un hecho “anecdótico” y la vida sería muy aburrida sino hay diferencias. Recordó que es el pueblo quien “pone a todos en su lugar... cuando alguien se excede”. A la gente no le importa si se pelean o se reconcilian, “la gente lo que quiere es que le resuelvan sus problemas”.
El tema de la violencia en la entidad y el país fue uno de los ejes de la mañanera del viernes. El Presidente reconoció que es un problema cuyas causas se están atendiendo y la estrategia es que haya ingresos para las familias, salarios justos, oportunidades para los jóvenes, con el complemento de que las autoridades castiguen a quienes cometen delitos y no haya corrupción.
Dijo que los “actos vandálicos” del 12 de agosto fueron “de tinte propagandístico, para afectar el proyecto de transformación”.
(Con información de Arturo Sánchez Jiménez)