Las fuerzas armadas se abstuvieron de comentar el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa, donde se confirmó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tenía infiltrado a uno de sus elementos en la normal rural Raúl Isidro Burgos, quien también desapareció la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Funcionarios del gabinete de seguridad nacional señalaron que continuará siendo la Secretaría de Gobernación (SG), mediante la comisión para la verdad, quien emita la información oficial sobre este caso.
Desde meses después de los hechos, en enero de 2015, el entonces titular de la SG, Miguel Ángel Osorio Chong, ofreció que se abrirían las instalaciones y cuarteles militares a los familiares de las víctimas, lo cual no ocurrió hasta el 25 de julio de 2019.
En esa fecha, integrantes de la comisión para la verdad y cinco de los padres de los estudiantes desaparecidos ingresaron a las instalaciones del 27 Batallón Militar, en Iguala, donde hicieron un recorrido y hablaron con algunos de los mandos militares para obtener datos que sumen a la investigación del caso.